El Ejército de Rusia avanza este viernes contra la capital de Ucrania, Kiev, y analistas internacionales advierten que en las próximas se recrudecerá el conflicto en el este de Europa. Mientras, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, pide a la comunidad internacional que haga algo más y advierte por la intención de Vladimir Putin de ir por el Gobierno democrático, miles de ciudadanos abandonan la ciudad en medio del ruido de las sirenas que advierten ataques.
Tal como había anticipado un alto cargo de Ucrania, las fuerzas rusas entraron este viernes en zonas de las afueras de la capital, y las tropas locales defendían posiciones en cuatro frentes a pesar de estar en inferioridad numérica. Durante las últimas horas los misiles rusos bombardearon la urbe donde se concentra un considerable núcleo de la población que ha optado por huir a las afueras del país. Se calcula que 100.000 personas huyeron mientras las explosiones y los disparos sacudían Kiev.
Esta mañana, las fuerzas ucranianas informaron que derribaron a primera hora del viernes un avión enemigo que se estrelló contra un edificio de viviendas y lo incendió. De acuerdo a las declaraciones de Anton Herashchenko, asesor del ministro del Interior, aún se desconocía si la aeronave estaba tripulada o si podía ser un misil.
Las autoridades municipales de Kiev dijeron que al menos ocho personas resultaron heridas cuando el objeto se estrelló contra un bloque de apartamentos, informó Reuters. «Horroroso ataque de misiles rusos sobre Kiev», escribió en Twitter el ministro de Asuntos Exteriores, Dmytro Kuleba, y agregó: «La última vez que nuestra capital vivió algo así fue en 1941, cuando fue atacada por la Alemania nazi».
Al mismo tiempo, se producen intensos combates en la ciudad de Sumy, en el noreste del país, mientras que un puesto fronterizo en la región sudoriental de Zaporizhzhya había sido alcanzado por misiles, causando muertos y heridos entre los guardias fronterizos. La ciudad de Lviv, en el oeste del país, también está bajo ataque ruso.
La palabra del Presidente ucraniano y la intención rusa
Autoridades estadounidenses y ucranianas afirman que Rusia pretende tomar Kiev y derrocar al Gobierno, al que Putin considera una marioneta de Estados Unidos. El presidente Zelenski habló ante la comunidad y dijo que entendía que las tropas rusas venían a por él, pero prometió quedarse en Kiev. «El enemigo me ha marcado como objetivo número uno. Mi familia es el objetivo número dos. Quieren destruir políticamente a Ucrania destruyendo al jefe de Estado», remarcó en un video.
Este jueves Rusia lanzó su invasión por tierra, aire y mar el jueves tras una declaración de guerra de Putin, en el mayor ataque a un Estado europeo desde la Segunda Guerra Mundial. Mientras la comunidad mundial habla de una invasión, Putin dice que Rusia está llevando a cabo «una operación militar especial» para impedir que el Gobierno ucraniano cometa un genocidio contra su propio pueblo. También dice que Ucrania es un Estado ilegítimo cuyas tierras pertenecen históricamente a Rusia.
