El director de operaciones del Banco Mundial, Axel Van Trotsenburg, confirmó que su organismo le otorgará a la Argentina un crédito por USD 2.000 millones para este año. Además, le expresaron al ministro de Economía, Martín Guzmán, que cuentan con su apoyo para las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI), las cuales se encuentran en la etapa final y se espera que para la próxima semana el proyecto ingrese al Congreso de la Nación.
Esto fue anunciado por el ministerio de Economía, quien por medio de su cuenta de Twitter explicó que «los fondos se suman al préstamo récord de USD2.100, otorgado el año pasado, destinado principalmente a dar respuesta a la crisis provocada por el COVID 19«. Además, remarcan que «la relación entre Argentina y el Banco Mundial es muy importante para el desarrollo de sectores claves como la salud, el transporte, la inclusión social y el medio ambiente».
El acuerdo se logró mediante una reunión virtual que mantuvieron Guzmán y el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz, con el director de operaciones del Banco Mundial. Según informó Télam, el funcionario destacó el crecimiento logrado por nuestro país durante el año pasado y se comprometió a colaborar con Alberto Fernández en busca de un desarrollo inclusivo para la economía.
Las deudas de la Argentina en 2022
A este caso con el Banco Mundial debemos sumar la ya conocida deuda tomada por Mauricio Macri en 2018 por USD 57.000 millones al FMI. Esta misma se sigue pagando a día de hoy y la actual gestión logró un acuerdo para extender el plazo de pagos de las cuotas a vencer en 2022 porque sino el país entraría en default. Actualmente se adeudan pagar USD 44.000 millones.
Por otro lado, internamente se deben cerca de USD 50.000 millones desde el Tesoro Nacional al Banco Central correspondientes a la emisión monetaria, pagos adelantados de bonos y presupuesto otorgado. De esta manera, con al menos tres frentes de deuda abiertos, la situación económica Argentina parece ser crítica en el país de aquí a algunos años si no se reduce el déficit interno.
