Cada vez que se paran frente a los micrófonos, los referentes de Juntos por el Cambio vinculados al PRO evitan dar precisiones sobre el armado de cara a las elecciones 2023. “No es el momento”, esgrimen y subrayan que hoy la agenda va por otro lado. Sin embargo, puertas adentros hay movimientos y discusiones internas entre los dos bandos del espacio amarillo con un claro objetivo: empezar a diagramar las listas de los comicios ejecutivos del próximo año.
“No estoy pensando en una candidatura: ni mía ni de nadie. Falta mucho”, dijo el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, semanas atrás en una entrevista. Un planteo similar al que suele repetir la diputada nacional María Eugenia Vidal y otros referentes del área moderada del PRO. En tanto, desde el sector de los “halcones” la exministra Patricia Bullrich se anima a mirar a futuro y dar algunas definiciones sobre el armado, aunque suele ser reacia a dar nombres concretos.
A pesar de la cautela que buscan manifestar los moderados, puertas adentro se empieza a sentir el furioso armado política con intenciones electorales. Mientras decía “no pienso en una candidatura”, Larreta cambio a ministros de su gabinete para convertirlos en asesores y empezó a girar por el país en busca de aliados en el interior.
En el mismo sentido, este martes el mandatario capitalino se reunió con el diputado Diego Santilli (potencial candidato a gobernador bonaerense), el excandidato a vicepresidente de Macri, Miguel Ángel Pichetto, y la abogada Florencia Arietto. Esta última era una aliada y asesora en seguridad de Patricia Bullrich, a quién abandonó para dar el salto al ala moderada con aspiraciones a un cargo ejecutivo el próximo año.
Arietto trabajará también en el diseño de propuestas en materia de seguridad y narcotráfico, al tiempo que pretende aportar un discurso bullrichista con un tono más duro al que suele usar el ala moderada. A pesar de que puertas afuera lo nieguen, el “robo” de una pieza del tablero de la presidenta del PRO es una jugada del larretismo donde expone que hoy la cabeza del mandatario porteño está en su candidatura presidencial. En el mientras tanto, quedan en segundo plano reclamos diarios de los porteños sobre tarifazos, ventas de espacios públicos para negocios inmobiliarios y gastos innecesarios en cargos estatales.
La mesa de JXC
En paralelo a esta foto, Patricia Bullrich se mostró junto a la plana mayor de Juntos por el Cambio en el lanzamiento de la Mesa Federal para dirimir internas de cara al 2023. La convocatoria fue acordada el 15 de febrero pasado en una reunión mantuvieron los presidentes de los principales partidos que integran la coalición: Bullrich (PRO), Miguel Ángel Pichetto (Peronismo Republicano), Gerardo Morales (UCR) y Maximiliano Ferraro (CC).
De esta manera, se busca darle mayor calibre institucional a la coalición opositora en un año clave para comenzar a definir el armado electoral tanto en JxC como el Frente de Todos. Ahora, la oposición buscará avanzar con encuentros provinciales que luego trasladaran los ejes tratados a la Mesa Federal y culminar con un masivo Congreso Nacional.
En resumen, la coalición opositora ya tiene entre ceja y ceja el 2023 a pesar de que puertas afueras apelan a un discurso de “cautela” como estrategia para que el electorado no cuestione la ambición política. Sin embargo, del otro lado de los muros las internas son cada día más feroces, con traspaso de bandos y fuertes cuestionamientos entre los sectores que componen la alianza.