Federico Pachi Carrizo viene teniendo unos días bastante movidos, los cuales parecen haber llegado a su fin. El hombre que sonó para ponerse la camiseta de Vélez y de Rosario Central en este mercado de pases terminó acordando su llegada a Peñarol en medio de una situación bastante polémica, ya que su salida de Cerro Porteño se dio en condiciones cuanto menos extrañas.
¿Qué fue lo que pasó? El volante que tuvo un paso por Boca estaba a punto de firmar un nuevo contrato con Cerro Porteño, club donde se destacó y logró convertirse en un jugador reconocido. Sin embargo, la firma no se produjo y la prensa paraguaya aseguró que esto sucedió porque el atacante no aceptó colocarse la vacuna contra el Covid 19.
Luego de estar varios días a la deriva, se confirmó que Carrizo seguirá su carrera en Peñarol de Uruguay, y en esta ocasión sí aceptó colocarse la vacuna, ya que fue un requisito que pudo el Manya para aceptarlo. Así lo confirmó Ignacio Ruglio, presidente del conjunto Charrúa, quien terminó confirmando la llegada del hombre surgido en Central.
No se vacunó
“Carrizo no tiene la vacuna, pero nos confirmó que llega y se la aplica. Está dispuesto en el contrato como una cláusula. Esta semana debería cerrarse todo. En principio, será un contrato por seis meses”, afirmó el directivo. Si bien desde el entorno de Pachi desmienten lo que se informó en Paraguay, quedó confirmado que efectivamente no estaba inoculado.
Ahora le llegó la chance de probarse en un gigante como Peñarol, donde lo esperan con los brazos abiertos. “La incorporación de Carrizo es un plan que ya tenía la gerencia deportiva. Que tenga características muy parecidas a las de Facundo Torres, nos hizo pensar que era un jugador que le faltaba para el esquema que utiliza Larriera”, expresó Marcos Arce, consejero del conjunto Carbonero.