En el segundo día de guerra entre Rusia y Ucrania, el Presidente del país agredido fue trasladado a un búnker secreto. El avance de las tropas rusas ponen en peligro a la capital, Kiev, y la integridad del mandatario ucraniano. Luego de una madrugada con bombardeos en las cercanías del corazón de la nación invadida, se siguen tomando medidas para el resguardo de los civiles y funcionarios.
El repentino ataque de Vladimir Putin a Ucrania, sacudió la normalidad en la vida en el país del Este de Europa. El temor desencadenó en la toma de decisiones urgentes. Muchos civiles abandonaron el país, mientras que los residentes en Kiev tuvieron que ser trasladados a refugios antibombas. El segundo día de ataque ruso fue incesante y la preocupación sigue en aumento.
Además de la inquietud de lo que pueda llegar a suceder con el avance de las tropas rusas, se suma la incertidumbre. Nadie sabe qué tiene en mente el Presidente de la Federación de Rusia. Su ejército ingresó por el Este y Norte de Ucrania y está muy cerca de Kiev. Allí es donde las fuerzas armadas de Ucrania intentan contener el avance ruso. Al inicio de este viernes se dieron enfrentamientos muy fuertes.
Toda esta mezcla de intranquilidad y pánico, hicieron que Volodímir Zelensky sea trasladado a un búnker situado en la capital ucraniana. Es incierto qué harán los rusos si llegan al centro de Kiev. Es por eso que decidieron preservar la integridad del mandatario. Aunque se encuentra aislado por las represalias que puede llegar a tener, sigue en contacto con sus funcionarios y la población, cuenta CNN.
El lugar donde se refugió el Presidente ucraniano es desconocido por obvias razones. Pese a estar cada vez más acorralado, tomó la decisión de no irse del país. El día jueves, en cadena nacional, comunicó su postura: «Soy el primer objetivo de Rusia y mi familia el segundo, pero no me voy a ir de Kiev«, afirmó. Al mismo tiempo denunció estar solo ante la agresión y reclamó ayuda extranjera.