Las declaraciones de la ministra de Educación de Ciudad de Buenos Aires, Soledad Acuña, no solo causaron risa entre muchos usuarios, sino también bastante indignación por la minimización de las consecuencias de la pandemia en las personas, sobre todo en los niños, quienes conforman el sector social más postergado dentro del periodo de vacunación. A raíz de esto, denuncian falta de inversión para protocolos covid-19, para garantizar una vuelta a clases segura y sin contagios.
El biólogo Ernesto Resnik expuso varias cuestiones que dan cuenta del “negacionismo” de algunos funcionarios del GCBA, como Horacio Rodríguez Larreta, para tratar el tema con seriedad. “En el mundo se hicieron cosas por garantizar el regreso seguro a las escuelas, ventilación, testeos, medidores de CO2, barbijos. En CABA, el distrito más rico por lejos, no se hizo nada de eso y casi que se boicoteó cualquier solución propuesta”, planteó en Twitter.
«Los chicos no se contagian»
Según distintas informaciones que trascendieron en estos últimos meses, la gestión del Gobierno para combatir la pandemia se diferenció del resto del país, con varios resultados negativos. Por un lado, a raíz del faltante de testeos y vacunas, muchos porteños eligieron irse a la provincia de Buenos Aires para poder realizarse las intervenciones. Con respecto a las vacunas en sí, se postergó a los menores de 18 años, al priorizar la aplicación de la segunda dosis a los adultos.
“Los chicos no se contagian camino a la escuela”, “las escuelas, en general, están más cerca de los domicilios de los alumnos”, fueron algunos de los dichos que lanzó Horacio Rodríguez Larreta en una conferencia de prensa. Al respecto, Resnik señaló: “Para eso usaron mentiras y engaños: mintieron con que «los chicos no contagian» usando números falsos, y engañaron con que alcanzara con que «los chicos no se enferman», cuando el problema, antes de las vacunas, era llevar el virus a casa. Y CABA fue el peor distrito de la pandemia”.
El suceso que más disparó las alarmas entre los padres y tutores fue la ola de contagios en las colonias y escuelas de verano. La falta de protocolos y los constantes cambios sobre el tratamiento de los contactos estrechos fueron los errores más graves que se cometieron, ocasionando que cientos de chicos y, por ende, adultos, se contagiaran a los primeros días de asistir a esos espacios.
«Me encontré con un desastre. Cero organización. El primer día no había orden en la puerta. Creí que iban a seguir con el protocolo de las escuelas, pero no. Era como si la pandemia no existiera. Un abarrotamiento de gente, todos apretados. Entre que la gente no se cuida y la escuela no ponía límites, fue un caos», denunció hace unos días una madre que llevó a sus dos hijos a la institución educativa.
Aumento de internaciones pediátricas
Al día de hoy, la postura de Soledad Acuña y Horacio Rodríguez Larreta se contradice con los datos sobre internaciones pediátricas. Oscar Trotta, director del Hospital Garrahan, advirtió en diciembre que, debido al aumento de contagios, tuvieron que habilitar un ala exclusiva para niños enfermos de coronavirus. Asimismo, se constató que muchos de ellos no contaban con vacunas, o solo tenían la primera dosis.
“Lo peor no es que el desprecio de la ministra Acuña sea ahora que la situación cambió, el problema es que este desprecio lo tuvo siempre, cuando no había vacunas, durante las peores olas de contagios y cuando tenía récord mundial de muertos en su distrito. Negacionismo”, sostuvo el biólogo. A menos de un mes de que empiece la actividad educativa, las autoridades sanitarias están alerta sobre qué pasará cuando el regreso a las aulas se efectúe.