El Gobierno atraviesa horas de mucha tensión interna con claras diferencias y cruces, entre otras cuestiones centrales, por el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que se debatirá esta semana en el Senado. Este escenario derivó en la decisión de dar «libertad de acción» a sus legisladores para que voten a favor o en contra el proyecto. Los números previos dan un respiro al presidente Alberto Fernández quien apuesta a pleno al rol de la oposición.
Ante la posibilidad de que, tal como pasó en Diputados, el núcleo duro kirchnerista rechace el acuerdo, el Poder Ejecutivo cuenta con que Juntos por el Cambio mantenga la posición que adoptó durante el debate de la semana pasada. Sin el aval de la principal coalición opositora, el Gobierno no podría permitirse votos propios en contra si quiere que salga la ley. Si bien se espera que la oposición reedite su estrategia, este martes se reunirá la Mesa Nacional del espacio y de allí surgirá la posición definitiva, precisó Télam.
Hoy también se juntará la comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara alta para avanzar con la firma del dictamen de mayoría y único del entendimiento con el organismo financiero internacional. El ministro de Economía, Martín Guzmán, pidió el lunes que la Cámara alta cumpla en tiempo y forma con la sanción de la ley, ya que el próximo martes 22 de marzo hay un vencimiento de la deuda con el FMI y el objetivo de la Casa Rosada es tener todo cocinado antes de esa fecha.
Votos a favor
Hasta el momento, la estrategia del Gobierno se apoya principalmente en el aval de la oposición y senadores propios que responden a los gobernadores peronistas. Respecto a la postura de JxC, este lunes se habían encendido alarmas en Balcarce 50 ante el trascendido de que el PRO planteó puertas adentro que no aprobaría el proyecto si el Gobierno no confirma con medidas que no aplicará aumentos a las retenciones. Finalmente, esto se descartó y la coalición opositora votaría en verde.
En tanto, los parlamentarios que responden directamente a los gobernadores también darían aval al acuerdo con el FMI enfocándose en cómo impactaría a las arcas regionales un posible ingreso en default de no autorizarse la toma de crédito para cubrir la deuda. De este modo, al día de hoy el Gobierno cuenta con el voto positivo de, al menos, 20 senadores oficialistas, 34 de la oposición y 3 de sectores aliados.
El rechazo del Kirchnerismo duro
En la vereda de enfrente se ubicarían unos 12 legisladores que responden al núcleo duro de la vicepresidenta de la Nación, Cristina Kirchner, que se encuadran en las filas de La Cámpora y el Instituto Patria. No obstante, aún se desconoce si todos ellos votarían en contra debido a que algunos podrían optar por ausentarse o abstenerse, dos maneras de mostrar disconformidad contra el acuerdo.
En consecuencia, en la lista de rechazos ya se confirmaron cuatro senadores de La Cámpora que seguirían la decisión que tomó este espacio en Diputados, mientras que la mendocina Anabel Fernández Sagasti aún no hizo oficial su postura. . A su vez, la nómina incluye a 7 legisladores que responden a la presidenta de la Cámara, entre ellos el neuquino Oscar Parrilli (Neuquén), quien será uno de los protagonistas al ser considerado uno de los “voceros” de la Vicepresidenta.
Por el momento, los números sonríen al Gobierno nacional que podría conseguir en las próximas horas el aval parlamentario al acuerdo con el FMI que contempla el nuevo plan de pago de la deuda de 45 mil millones de pesos.
