Finalmente, comenzó el debate por el acuerdo del Gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI). El marco es sumamente tenso. A las disidencias dentro del propio oficialismo, se le suma una serie de incidentes en las inmediaciones del Congreso. Pero en términos políticos, lo más resonante es que Máximo Kirchner se anotó un ausente y presente. Es que el diputado de La Cámpora se acercó esta mañana al Parlamento, pero no entró a debatir ya que está completamente en contra de pagar la deuda de 45.000 millones de dólares.
Más allá de su “ausencia”, el titular de la Cámara baja, Sergio Massa, dio inicio a la sesión con un quórum compuesto por 129 diputados presentes. En este marco, los bloques debatirán la letra del entendimiento con la entidad financiera en una sesión especial que apunta a validar y darle media sanción al acuerdo que pactó Alberto Fernández por el refinanciamiento de la deuda generada durante la gestión de Mauricio Macri.
A pesar de haber llegado al Congreso durante la mañana del jueves, Máximo Kirchner no bajó al recinto en el inicio y disipó el misterio: no dará un voto negativo ni se abstendrá. Mucho menos votará a favor. No obstante, compañeros suyos de La Cámpora y del kirchnerismo sí se encuentran en el debate. Ellos son Paula Penacca, Leopoldo Moreau, Gabriela Estévez, Cristina Brítez, Florencia Lampreabe y Hugo Yasky.
A ellos se suman los legisladores del bloque Patria Grande, organización liderada por Juan Grabois, quien manifestó que no acompañará el acuerdo. Los diputados ultra K Rodolfo Tailhade y Marcos Cleri, en cambio, no dieron quórum ya que se ubicaron en sus bancas con la sesión ya iniciada. Se espera que el debate se extienda hasta pasada la medianoche, y la votación se realice bien entrada la madrugada del viernes.
Máximo en el Congreso
Informal, vestido de jean y suéter, el líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, fue uno de los primeros en llegar al edificio de Diputados en la cuenta regresiva del inicio de la sesión para tratar el acuerdo con el FMI. Temprano y sin hablar con los medios, como es costumbre, el diputado nacional ingresó al Congreso varias horas antes de las 14.00, horario estipulado para el puntapié inicial.
La carta de quiebre
Su posición en torno a la negociación cobró impacto tras su renuncia a la jefatura del bloque oficialista por no coincidir en la letra del entendimiento con la entidad financiera. “He tomado la decisión de no continuar a cargo de la presidencia del Bloque de Diputados del Frente de Todos. Esta decisión nace de no compartir la estrategia utilizada y mucho menos los resultados obtenidos en la negociación con el FMI”, remarcó Máximo en un comunicado oficial.
En esta línea, el hijo de la vicepresidenta Cristina Kirchner buscó desligarse de la situación al querer aclarar que la tratativa es “llevada adelante exclusivamente por el gabinete económico y el grupo negociador que responde y cuenta con la absoluta confianza del Presidente de la Nación, a quien nunca dejé de decirle mi visión para no llegar a este resultado”. Desde ese entonces, las incertidumbres sobre la postura que adoptarán los diputados de la agrupación kirchnerista aumentaron.
¿Habemus media sanción?
Mientras tanto, el proyecto quedó redactado con un solo artículo que habilita al Poder Ejecutivo a firmar un programa de facilidades extendidas en los términos del artículo 2 de la Ley N. 27.612. Además, se evitó utilizar las palabras “deuda” y “refinanciamiento”. En Casa Rosada son optimistas en torno a la media sanción, sobre todo tras el consenso alcanzado con Juntos por el Cambio.