La situación es complicada. Desde Telefe aseguraron que el estado de salud de Gerardo Rozín es delicado, y los mensajes de distintas figuras de los medios de comunicación, no tardaron en llegar. Ahora, fue su gran amigo Baby Etchecopar quien se mostró realmente dolido en «Basta Baby», el ciclo que conduce a través de la pantalla de A24.
«Está pasando un mal momento. Es mi amigo desde hace muchos años. Es un tipazo. Yo me lo encontré en Miami hace un año y medio. Él iba con la mochilita y su mujer, nos encontramos en un shopping, y le dije ‘viste que somos los únicos dos feos de la televisión que medimos 1,60 y siempre hacemos tres puntos'», recordó el periodista.
«La está pasando mal Gerardo. Estamos todos con vos, qué puedo decirte. Que te quiero tanto, que sos tan buen tipo. Hasta el último momento en televisión nos hiciste disfrutar, reír, con esa calidez, con ese don de gente. Estamos todos hechos mierd… Pero bueno, hay que seguir adelante. Fuerza«, señaló Baby Etchecopar y decidió comenzar con su editorial.
Afectado por la situación
«Nunca me costó tanto…», sostuvo al intentar dejar su descargo, pero aún movilizado por lo que comunicó. Con la ayuda de sus compañeros, pudo continuar y habló de lo que está sucediendo en nuestro país y el mundo entero. «Los indignos pueden ganar y sentirse ganadores. El apoyo popular no está sustentado por el peso de la dignidad. Putin puede ganar, pero para el mundo es un hijo de puta que mató inocentes. Pasa lo mismo en Argentina, cuando intentamos analizar el gobierno y sus protagonistas, siempre está la indignidad. Ninguno tiene la solvencia moral», lanzó.
«Se puede conseguir un arreglo con el FMI, pero nada sirve cuando tenés un gobierno de delincuentes. La Cámpora siempre va a perder porque no hay dignidad. Al gobierno argentino lo condena el pasado. Cristina cuando la indagaron dijo ‘a mi me absolvió la historia’. Se veía venir que la historia la iba a condenar. Para votar una ley tuvieron que arrodillarse ante la oposición porque son impotentes. No es votar para ganarle al otro indigno. Es votar a un digno, para ganarle a los chorros y a los indignos. Nos hemos convertido en un país donde la dignidad no existe», finalizó.