Decidió contar su punto de vista. Sin lugar a dudas, Mar Tarrés es una de las activistas que lucha contra la gordofóbia más importantes en argentina. Es por esto que, Carmen Barbieri decidió invitarla a su ciclo en Ciudad Magazine, para charlar sobre lo que se está viviendo en el país y en el mundo. Delante de las cámaras, Mar decidió sincerarse y compartir su postura sobre lo que está sucediendo.
«Argentina es uno de los países más gordofóbicos del mundo. En el mundo, lo que sucede es que los medios de comunicación y el mercado son los que determinan los estereotipos de belleza. En Argentina es muy cruel porque podés ver hombres feos o gordos triunfando en la televisión. Pero no vas a ver nunca una mujer fea y gorda que no pertenezca a lo hegemónico, triunfando en la tele», sentenció Mar Tarrés.
Sin embargo, Carmen Barbieri la interrumpió para comentar: «Yo triunfo en la tele y soy gorda, y estoy feliz de que me hayan aceptado». Pero luego se sinceró al contar que «le costó mucho entrar, hacer ‘movete’ y reemplazar a Georgina. Uno de los directivos de América, que ya no está, dijo ‘no, es muy gorda para ser conductora’. Todos decían que sí, y gracias a eso yo entré, y a la semana él tenía mi foto en su despacho y me decía ‘yo no quería que entraras porque eras talla XL, queríamos una chica delgada conduciendo'».
«Pese a todo, yo seguí adelante. Por eso no te tiene que importar nada, porque el bullying te hace mal psicológicamente», compartió la conductora. A lo que Pampito comentó: «Pero pusieron un ‘pero’, tiene razón Mar». Es por esto que, la invitada, comentó: «Disculpa, pero yo te he visto a lo largo de tu carrera hacer muchas dietas, o cuidarte mucho con tu cuerpo. ¿Vos sentís esa presión de que, para pertenecer al medio, tuviste que siempre hacer dietas y bajar de peso?».
Rápidamente, Carmen confesó que sí sintió esa presión, pero aclaró que es «porque yo trabajaba con mi cuerpo, era vedette y necesitaba estar delgada, estilizada. Me cuide mucho, mucho tiempo, me sigo cuidando, pero no estoy obsesiva como cuando era muy jovencita. Pero me costó entrar en muchos trabajos». Finalmente, la invitada concluyó comentando que «lo ideal sería que pongan a una persona flaca o gorda, y que no le generen un trastorno alimenticio a la persona, para hacer un personaje».
