Después de dos años de pandemia del coronavirus, Alemania comenzó una apertura hacia la «nueva normalidad». La cartera sanitaria confirmaron que ya no será obligatorio utilizar barbijos en lugares cerrados y tampoco se deberá presentar certificado de vacunación en bares, restaurantes y cines.
Esta decisión viene de la mano de una lenta bajante en las muertes y contagios, aunque los opositores cuestionaron la decisión. Hasta el sábado, las medidas eran de «protección básica» en donde solo es obligatorio utilizar tapabocas en centros sanitarios y el transporte público, informó NA.
Pese a las nuevas indicaciones, el gobierno manifiesta y recomienda que se siga utilizando el barbijo para prevenir la enfermedad y ser más responsables: «Yo lo haré por el momento y lo recomiendo a todos los clientes», expresó Karl Lauterbach, ministro de sanidad.
En marzo, se aprobó la Ley de Protección de Infecciones que sostiene que las ciudades o regiones serán las que decidan que métodos utilizarán ante una alta incidencia de casos. A pesar del reclamo los opositores, finalmente aceptaron la reglamentación.
En las últimas 24 horas se confirmaron más de 196 mil personas positivas y 292 muertos. El 75,9% de la población alemana tiene el esquema completo de vacunación y se avanzó con la tercera dosis en el 58,7%.