El exministro de Hacienda, Rodrigo Chaves, y el expresidente José María Figueres disputarán la segunda vuelta de las elecciones presidenciales el domingo en Costa Rica, que definirá quién llevará las riendas del país centroamericano entre hasta el 2026.
El economista Rodrigo Chaves llega a la contienda con opciones de triunfo, según recientes encuestas, a pesar de su corta carrera política y de enfrentar denuncias de acoso -que él ha negado- durante su paso por el Banco Mundial, al que renunció tras ventilarse el escándalo en 2019.
Es el abanderado del recién creado partido Progreso Social Democrático (PPSD), liderado por la periodista televisiva Pilar Cisneros, una fuerte crítica de los grupos tradicionales. El candidato del PPSD, de 60 años, se coló por sorpresa en el segundo lugar en la primera vuelta de febrero.
Sin prometer cambios radicales en el funcionamiento del Estado, su mensaje se centra en sacar del poder a quienes han gobernado el país en los últimos 40 años. «A mí me dicen que soy muy arrogante y muy dictatorial, pero creo que digo las cosas como son y a la gente no le gusta», dijo este mes ante dirigentes empresariales, informó Reuters.
Figueres, presidente entre 1994 y 1998, intentará retomar el poder aferrado a su imagen de hombre experimentado. Heredero de la política tradicional dominante en el siglo XX, llega al balotaje queriendo materializar un esfuerzo de reelección, a pesar de su golpeada reputación por escándalos de corrupción.
El exmandatario, de 67 años, es hijo del caudillo y tres veces gobernante José Figueres Ferrer, gestor de la abolición del ejército y fundador del Partido Liberación Nacional (PLN), agrupación socialdemócrata que registra más gobiernos en su haber y que se ha ubicado al centro del espectro ideológico.
