La Confederación General del Trabajo (CGT) emitió un comunicado duro contra el presidente Alberto Fernández. Más allá que durante el último mes se reunió en dos ocasiones con Pablo Moyano, secretario general del sindicato, las tensiones continúan. Ahora el organismo adelantó que no se movilizarán por el 1 de mayo y expresaron «preocupación» por la situación del país.
«El contexto socio-económico en el país es preocupante; la inflación erosiona los salarios y los ingresos, y con mayor gravedad impacta en los más vulnerables. Las paritarias, los ingresos de emergencia para los sectores informales y los aumentos extraordinarios a jubilados y beneficiarios de planes sociales dispuestos por el gobierno, generan un alivio transitorio«, resaltó el sector según NA.
De esta manera, la CGT reconoce no estar conforme con las políticas del Gobierno de Alberto Fernández. En este contexto, piden mejores condiciones laborales y paritarias para mejorar la situación de cada trabajador. Sin embargo, el gremio que maneja Pablo Moyano, entre otros dirigentes, también apuntó contra los empresarios como responsables de esta situación.
¿La CGT de que lado está?
Tras haberse reunido con el presidente, la CGT quedó en medio de la interna oficialista. Sin una inclinación definida oficialmente, se nota al sector más cercano al kirchnerismo que al peronismo aunque mantienen su apoyo al Gobierno nacional en general porque consideran que los empresarios son quienes deben colaborar con este momento crítico a nivel mundial.
«Es hora de que los formadores de precios, los grandes especuladores financieros que multiplican sus ganancias en la crisis y los que recibieron una renta extraordinaria producto de la alteración de los mercados por la guerra, asuman su responsabilidad y contribuyan a mitigar una desigualdad social que hoy resulta intolerable», cuestiona el sindicato un discurso similar al del jefe de Estado.
