Con el regreso de Andy Kusnetzoff a la pantalla de Telefe, llegaron algunas críticas por los cambios que hicieron en ‘PH Podemos Hablar‘. Entre ellas, la de Marina Calabró, que dejó en claro su postura sobre la máquina de ositos que juegan al final del programa. Tras varios idas y vueltas, la columnista de ‘Lanata Sin Filtro‘ decidió responderle al colega por sus dichos.
Todo comenzó luego de que saliera al aire el primer programa de la nueva temporada de ‘PH Podemos Hablar’. Frente a esto, Marina Calabró había comentado: «El broche de oro, la maquina recolectora de peluches. No creí tener vida para esta pavada incalificable televisada. ¡Juegan los adultos! ¿Qué decir?». Rápidamente, se generó mucha polémica, y en ‘LAM’ fueron a buscar a Andy Kusnetzoff, para que le responda a la colega.
«El que quiere criticar, está bárbaro. Yo estoy feliz con el debut de PH», aseguró frente al notero que envió Ángel de Brito. Luego destacó el segmento nuevo del ciclo: «Lo mejor, fue el juego de los ositos, lo que más me gustó». Finalmente, hizo referencia a lo sucedido con la colega: «No tengo idea lo que dijo Marina. Pero está espectacular, descontracturó a los invitados. Me parece que lo voy a repetir. Ahora, ¿le tiene que gustar a todo el mundo? Cero, está perfecto. Lo mejor, fue el juego de los ositos, lo que más me gustó».
Tras todo lo sucedido, durante la columna de espectáculos de ‘Lanata Sin Filtro’, Marina Calabró decidió volver a opinar sobre ‘PH Podemos Hablar’. En esta ocasión, comenzó mencionando el rating del programa: «En lo que respecta al sábado, primero PH, pero mire el número… está bien era sábado santo, pero fue 7.9, bajo. Y mire el segundo, fue Cine Trece que hizo 7.7, y el tercero ‘La Odisea de los Giles’ con 7.6. O sea que el cine muy cerca de PH, lo cual, o habla muy bien del cine o muy mal de PH, usted elija la interpretación que prefiera».
Entonces, Jorge Lanata aprovechó la ocasión para tocar el tema, y Marina contó: «Dijo que lo que uno hace no tiene por qué gustarle a todo el mundo, que estaba todo bien. Y que la maquinola del peluche loco estaba firme como rulo de estatua. Yo prefiero que me respondan con maldad, porque si me van a responder con miedo no tiene sentido porque no nos podemos seguir peleando. ¿Qué tengo que decir? Tiene razón Andy. Me responde con demasiado cariño Kusnetzoff. ¡No, castigo! Hace tanto no batallo».
