Se viene otro golpe al bolsillo para quienes viven en la ciudad de Buenos Aires y consiste en un aumento de la bajada de bandera de los taxis, que pasará de $111 a $144. En ese sentido, el periodista Lucio Di Matteo explicó que «las audiencias públicas para los incrementos de los taxis que pide el Gobierno porteño son testimoniales» y aclaró que «la tarifa del taxi es un tema que resuelve cada ciudad».
Esta mañana en el noticiero de A24, el comunicador agregó que «durante la noche, la bajada va a ser de $174», es decir, en el horario de 22 a 6 de la mañana. En ese marco, la conductora del ciclo, Cata de Elía le preguntó sobre los motivos de la suba y el profesional fue contudente en su respuesta y remarcó que «razones no te dan, no se molestan ni siquiera en buscar excusas».
En esa línea indicó que «el aumento va a empezar a regir durante abril» y añadió que «no se sabe la fecha exacta». Frente a ese panorama, adelantó que «van a haber muchos viajes en taxi en la ciudad de Buenos Aires que van a superar los 1.000 pesos» y en consecuencia, recalcó que estas alzas llevan a que «haya cosas que parezcan muy baratas en la comparación y otras extraordinariamente caras».
A modo de ejemplo, contó que «fui a un bar, que no es muy caro, tomé un cafe con leche con medialunas y pagué $330» y entonces, se preguntó: «¿Cuánto es un viaje en taxi, 500, 600, 700 pesos», lo que lleva a que «viajar en taxi se esté transformando en un lujo». Además, recordó que «es el segundo aumento que se va a aplicar en abril desde diciembre».
«En diciembre fue 30%», señaló y agregó que «ahora, otro 30%». Lejos de quedarse callado, le habló directamente a los dirigentes y les marcó: «Muchachos, si quieren ayudarnos, ayudennos de otra manera, no es esta la forma». Al ser consultado sobre las aplicaciones para trasladarse, que no son taxis, Di Matteo afirmó que «las aplicaciones no son más baratas que los taxis».
A su vez, recalcó que «hay menos taxis porque no es negocio para los conductores salir con su vehículo a la calle» y detalló que «un peón de taxi arranca pagando $5.000, $6.000 por el alquiler del auto y a eso, tiene que sumarle comer y tomar algo». En ese contexto, la conductora contó que «el otro día me tomé un taxi y el peón del taxi me decía que había empezado a trabajar a las 6 de la mañana, eran las 22.30 y no llegaba a cubrir el alquiler del taxi».
