Son muy pocos los jugadores que admiten de que cuadro son hinchas y que lo dejan en claro cada vez que pueden. El caso de Nicolás González es uno de ellos porque hace poco volvió a manifestar su fanatismo por River. Pero, además, se animó a lanzar una declaración que podría generar cierto escándalo en el mercado de pases. Debido a que le quitaría a Boca la posibilidad de sumar un refuerzo de jerarquía.
El delantero inició su carrera en Argentinos Juniors y rápidamente fue captado por el Stuttgart de Alemania. Lo cual hizo casi imposible que el Millonario pudiera realizar un intento por sus servicios. Tras una buena presentación en la Copa América, la Fiorentina de Italia decidió acercar una propuesta formal y pagó 23 millones de euros por el 100% de su ficha. Sin embargo, esto no le quita el sueño de regresar a la Argentina.
«Lo dije antes, mi familia es toda de River, yo también. Cuando fuimos al Monumental a jugar contra Uruguay me llegó una camiseta y fue muy lindo porque no me lo esperaba. Se los agradecí mucho», manifestó González en una entrevista que le realizaron en ESPN. El regalo fue una casaca tricolor con su nombre y el número siete en la espalda.
¿Boca se queda sin un refuerzo?
«Con el Chino Martínez Quarta, lo estábamos molestando a Lucas Torreira para que venga con nosotros a jugar en River. Él es de Boca, pero lo estamos convenciendo», reconoció González. El volante uruguayo hace un tiempo admitió que necesitaba regresar a Sudamérica por temas personales y que veía con buenos ojos mudarse al conjunto de La Ribera.
Las palabras del jugador fueron difundidas por ESPN, sin embargo desde el Consejo de Fútbol nunca lo llamaron. Por otro lado, se rumoreó que las negociaciones con el Arsenal de Inglaterra se estancaron tras una serie de exigencias económicas. Lo cierto es que el volante se quedó con las ganas y ahora disfruta de su presente en la Fiorentina. Aunque la amistad con los argentinos podría generar que su pasión se tiña de otros colores.
