La vicepresidenta Cristina Kirchner brindó este viernes un extenso discurso en Chaco. Fue en el marco de su ponencia “Estado, Poder y Sociedad: la insatisfacción democrática”, luego de que la Universidad del Chaco Austral la condecorara con el Doctorado Honoris Causa. En este contexto, la titular del Senado abordó varios temas, entre ellos, la interna con Alberto Fernández. Sobre el Presidente, contó por qué lo eligió en 2019 para encabezar la fórmula del Frente de Todos.
Tras remarcar que no hay “disputa de poder” dentro del Gobierno y desmentir las versiones de los medios de comunicación, Cristina recordó que fue ella quien eligió a Fernández como candidato a Presidente de la Nación. “Elegí a alguien que no representaba a ninguna fuerza política, pero que además me había criticado duramente desde 2008”, dijo la vice, reconociendo las fuertes declaraciones que Fernández tuvo para con ella en su momento.
Seguidamente, Cristina diferenció al actual jefe de Estado de tres figuras que hoy integran el oficialismo. El primero de ellos, Sergio Massa, líder del Frente de Renovador y titular de la Cámara de Diputados. Continuó con Emilio Pérsico, uno de los referentes del Movimiento Evita e integrante del Gabinete nacional. Y el tercero, Héctor Daer, uno de los popes de la Confederación General del Trabajo (CGT). “Ahí habría una disputa de poder”, remarcó Kirchner.
En esta línea, la líder del Instituto Patria apuntó a las críticas en su contra: “De mí dicen: ‘Es mala, es mala, es mala’”, se quejó, y, si bien admitió tener “muchísimos defectos”, aseguró: “Nunca decido las cosas a través de mis hormonas, sino de mis neuronas”. Eso, según sostuvo, la diferenciaba de muchos dirigentes políticos de distintos partidos. Y concluyó diciendo que haber elegido a Alberto Fernández fue “un acto inteligente y generoso”.
“Siempre hablo de tres mandatos”
Previamente, al iniciar su discurso, Cristina marcó su distancia con Fernández. “Yo siempre hablo de tres mandatos”, sostuvo, en alusión a la gestión nacional de Néstor Kirchner y sus dos presidencias. En este sentido, afirmó que se siente parte de un proyecto colectivo “que cumplió una hazaña tras la crisis de 2001? y que “la mejor medalla” en su trayectoria política es la despedida a su segundo mandato en diciembre de 2015. “La Plaza de Mayo estaba de bote a bote”, recordó.
