Marcelo Longobardi, periodista y conductor de radio, manifestó que la renuncia de Roberto Feletti a la Secretaría de Comercio Interior era un «final cantado» y que formará parte de la lista de dirigentes que fracasaron en la lucha contra la inflación. Sin embargo, Longobardi sostuvo que esto también puede ser una jugada del kirchnerismo duro para responsabilizar a los funcionarios del albertismo, en caso de que la suba de precios se dispare en los próximos meses.
«Ayer contábamos que el Gobierno había resuelto cambiar de lugar a Roberto Feletti que dependía del ministro de Producción, Matías Kulfas. Su secretaría había sido mudada al Ministerio de Economía. Esta mudanza de área derivó en la renuncia de Feletti que en lo que va de este Gobierno fue el segundo secretario de Comercio que fracasó con combatir la inflación con controles de precios», expresó Longobardi en la radio CNN.
«En el diario La Nación, el periodista, Santiago Dapelo, dice que esto fue una maniobra del kirchnerismo para dejar a Martín Guzmán, ministro de Economía, con toda la responsabilidad sobre la suba de la tasa de inflación. Me pareció importante el enfoque. Ahora el sucesor de Feletti es Guillermo Hang, que presenta unos aspectos interesantes. Los empresarios están confiados en el fin de la confrontación y apuestan al diálogo», sentenció el exconductor de C5N.
«Si leemos lo que dice Luis D’Elía habrá que ver dónde empieza algo mejor o algo peor, porque dijo que los movimientos sociales tienen que ir a apretar a los formadores de precios. Habrá que ver si se impone el diálogo o el principio de D’Elía, que es una persona muy cercana al presidente, Alberto Fernández», explicó el periodista que ganó en 2016 el premio a la mejor labor en periodismo masculino.
«Respecto a la cuestión de la Fiesta en Olivos, el juez del caso ha convalidado el arreglo con el presidente y su esposa. Esta idea de que el presidente si no estaba en funciones al momento de ocurrir la fiesta en la Quinta de Olivos ha generado un enorme impacto en la opinión pública. El dramático deterioro de la imagen del presidente tiene que ver con esto. Es la imagen de un presidente que no cumplió con su propia regla. Ahora sepamos, que tenemos un presidente part time. Alberto puede decir en este momento soy presidente o en este momento no lo soy», ironizó Longobardi.
