Romina Manguel se animó a hablar de su dolor y detalló cómo fue su larga despedida con Gerardo Rozín, colega en el medio, y también su gran amigo durante muchos años. Lo anterior, sucedió en «PH podemos hablar» cuando Jey Mammon habló del lugar que ocupa en «La Peña de Morfi» tras la partida del conductor original, algo que le dio pie a la periodista para contar su caso.
Directa, Manguel señaló: «Gerardo siempre supo que se iba a morir, desde el primer día del diagnóstico. Y él trataba de convencer a sus amigos más íntimos y querido. A mí me decía ‘me voy a morir, eh’. En los últimos tiempos, él me llamaba todas las noches a las 12 de la noche. Y era una carga fuerte porque, primero nos reíamos mucho».
«Y después terminábamos hablando de la muerte, de las cosas que él quería cuando se muera y me pedía que yo lo anote. Como sabía que era una colgada, me decía ‘sé que no estás anotando, poné la cámara’. Y yo le contestaba ‘Gerardo, estoy en bombacha’», relató la famosa con sentimientos encontrados en el ciclo de Telefe.
Además confesó que el proceso fue angustiante: «Yo terminaba llorando a veces hasta las 5 de la mañana y me acuerdo que hablé con mi analista de esto y con mis amigos, y decidí hablar con Gerardo para decirle que no podía soportar esto porque me dejaba rota todas las noches y yo no puedo no dormir porque, además, tengo dos hijas”.
«Entonces, lo llamé, me costó esa charla, y cuando me senté con Gerardo le dije que me estaban haciendo muy mal estas llamadas a la noche. Y él me responde ‘ah, bueno. Yo me voy a morir pero la señora no duerme. ¿Sabés qué? No me importa que no duermas, tomate algo después. Yo me voy a morir y cuando me muera, vas a dormir. ¿Me entendiste? No se charla más del tema'», dijo para cerrar.