Un verdadero escándalo fue lo que se generó en las últimas semanas entre Jorge Rial y Susana Giménez. Todo comenzó cuando el exconductor de «Intrusos» aseguró que a la diva de los teléfonos no le iría bien con su obra de teatro en Uruguay. Lejos de quedarse callada, la conductora de Telefe redobló la apuesta y lanzó un duró exabrupto. «Que se vaya a la m…», arremetió.
Fue entonces, cuando el padre de Morena salió a liquidarla. «Susana se convirtió en una caricatura de sí misma, una caricatura deforme, mal hecha. El peor trabajo de un dibujante. Ella sabe que la gente ya no la mira ni la quiere como antes, entonces está nerviosa. Es consciente de que las barbaridades que dijo tienen un costo», aclaró sin pelos en la lengua.
«Ella siempre fue gorila. Siempre. Hizo algo que sólo hacen los canallas; usó a un discapacitado para pagar menos. Lo que pasa es que acá se le perdona todo y se olvida. Está sacada, fuera de eje. Tiene devoción por la ignorancia y le perdonan todo. Es una coleccionista de libros vacíos», apuntó Jorge Rial y Susana Giménez amenazó con llevarla a la justicia.
Sin embargo, ahora la diva habría cambiado de opinión, tal como lo comunicó en «Socios del Espectáculo», el programa que conducen Adrián Pallares y Rodrigo Lussich en Canal Trece. «Estoy en una salida con amigas, llegué hoy justo. Hacía mucho que no las veía. Comimos sushi, hubo una sobremesa… Le sacamos el cuero a todo el mundo. No, mentira», bromeó desde Uruguay.
Siempre sonriente, habló de su realidad en el reality. «Tenemos una escenografía gigantesca, un teatro realmente muy grande. Estamos sorprendidos. Estoy muy bien, es un placer. El teatro es muy cansador, pero para mí es un placer por las cosas que me dice la gente. Me recibe con amor, con mucho amor. Y eso siempre te llena el alma, me encanta», sostuvo. El cronista no dudó, y habló de un supuesto enfrentamiento legal. «¿Finalmente iniciamos las acciones?», indagó. «No», finalizó Susana con desgano.