Una situación cargada de sentimientos tuvo lugar en «Podemos Hablar», el ciclo que a través de la pantalla de Telefe, conduce Andy Kusnetzoff. Delante de cada uno de los televidentes que los acompañan sábado tras sábado, uno de los invitados, Leo Montero, decidió dar a conocer parte de su historia de vida, generando conmoción.
«Mi mamá murió muy joven, cuando yo tenía 19 años. Ella había tenido algo que en ese momento ni se llamaba así si quiera, un ACV», afirmó la figura de América TV, en torno a uno de los momentos más difíciles de su vida. «Me da un poco de vergüenza decirlo, pero yo le decía que quería ser profesor de educación física, kinesiólogo o periodista», reveló.
«Y ella me respondía: ‘Vos sos pintón y tenés facilidad de palabra, tenés que estudiar periodismo’. Le hice caso y fue lo mejor que me pasó en la vida», afirmó Leo Montero sobre su rol en la pantalla chica, donde ha tenido un gran éxito a través de diferentes formatos. Además, hizo referencia a cómo le costó poder adaptarse a Buenos Aires.
«Los que vinieron del Interior me van a entender con esto que voy a decir: Buenos Aires es una piña de Tyson. No sabía a dónde ir, con miedo, con esperanza, con ilusiones, sin conocer nada, con el bolsito con tu VHS, tu casette; la verdad es que vine de cero», sostuvo mostrándose más directo ante la mirada atenta de Andy Kusnetzoff.
«Soy bastante perseverante y terco y dije: ‘No vuelvo hasta que no consiga laburo’», aclaró. «Después con mi amiga Verónica Lozano estuvieron en AM diez años», le dijo el conductor. «Iba a ser por tres meses y terminó siendo una década; de hecho todos los que están acá hoy estuvieron invitados en AM alguna vez», finalizó Leo Montero sin tapujos.
