Emoción en el ciclo de Andy Kusnetzoff por lo que compartió un invitado: "Salir de su cuerpo" ESPECTÁCULO El Intransigente

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Emoción en el ciclo de Andy Kusnetzoff por lo que compartió un invitado: «Salir de su cuerpo»

Quedaron todos conmocionados con lo que contó uno de los invitados en ‘PH Podemos Hablar’.

Andy Kusnetzoff

Andy Kusnetzoff es uno de los conductores más destacados de la televisión. Cada sábado recibe un nuevo grupo de figuras, que se juntan en el ‘punto de encuentro’ de ‘PH Podemos Hablar‘, y comparten sus historias de vida. Es por esto que, durante la última emisión, el conductor les propuso que pasen al frente los que han tenido experiencias místicas, paranormales. Frente a esto, quedaron todos emocionados con lo que decidió compartir un invitado.

El primero en acercarse al ‘punto de encuentro’ fue Diego Topa, que compartió: «Me pasa con familiares o seres queridos que ya no están, tengo algunas señales. Me aparecen cosas en momentos inesperados o que estoy pensando algo y se me devuelve con una señal, eso me pasa. Lo he contado varias veces, pero con Romina Yan me ha pasado también, lo he hablado con Cris».

«Estoy pensando en algo y me aparece random la canción en el auto. Una canción de Chiquititas que yo había grabado con ella… me aparecieron dos, una con ella y otra con Jorgelina, las que yo había hecho el homenaje de Romina. En el auto, pero de la nada. O me aparece una foto, buscando otra cosa me aparece en el celular. Son señales, eso es lo que tiene que ver con gente que uno quiere, que no está», explicó el invitado.

Luego, Andy Kusnetzoff recordó que Leo García también había contado que le pasó algo parecido, pero con Gustavo Cerati, con quien era muy amigo. Sin dudarlo, el invitado expresó: «Si, por ejemplo, hoy venía en el auto y se escuchaba la canción de él y dije ‘bueno, acá me está acompañando’. Muchas cosas así, realmente cuando tenes un vínculo con un artista tan grande, que tiene un poder de alma tan grande, se comunican. Eso es real».

«Yo estaba en la clínica, él estaba inmóvil, lo abracé, me largué a llorar, y sentí que su mano me estaba acariciando la espalda, pero real. Yo creo que él tenía ese poder, en ese momento inmóvil, de poder salir de su cuerpo y hacer cosas… Empezó a sonar la alarma del respirador y todo ese tipo de cosas, porque no quería que esté llorando. Yo me di cuenta que él no quería que yo esté así… ‘llorar acá, conmigo, no. Por mí no llores’, eso me estaba diciendo. Te juro, uno invoca las cosas», compartió Leo García.

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