Hace poco más de un mes que en el Aeropuerto de Ezeiza está detenido un avión de Venezuela tripulado por ciudadanos de Irán. En total eran 15 junto a otros 4 venezolanos para transportar, supuestamente, autopartes a la Argentina. Ante las denuncias de Uruguay, Paraguay y Estados Unidos, las autoridades aeroportuarias han decidido iniciar un proceso de investigación contra ellos y sospechan de un posible ataque terrorista.
Días después se encontró que el piloto de la aeronave tenía vínculos con Al Quds aunque la investigación se estancó a la espera de los resultados de la caja negra. Mientras tanto, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán se manifestó al respecto y acusó a la Argentina de infringir los derechos humanos por no dejar salir del país a los tripulantes que a día de hoy no tienen cargos en su contra.
“Irán pide al gobierno de Argentina que cumpla con sus deberes y responsabilidades, poniendo fin a las restricciones y facilitando la salida inmediata de los cinco miembros de la tripulación iraní”, subraya el texto. Además, advierten que “el estatus del avión venezolano y de los miembros de la tripulación iraníes es completamente legal en el marco del derecho internacional y de las convenciones aéreas, por lo que no hay lugar a investigar a los ciudadanos iraníes”.
Este escrito fue firmado por Hossein Amir Abdollahian, canciller iraní, que expresó su «profunda preocupación» por los tripulantes y sus familias que además cuentan con su documentación retenida. Este último hecho infringe los derechos humanos para el dirigente que quiere que el Gobierno argentino tome cartas en el asunto y que la Justicia «dictaminará los pasos a seguir«.
¿Cuál es la situación de los tripulantes?
Según indicó el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, los tripulantes iraníes y venezolanos no tienen restricciones para circular dentro del país. A pesar de ello, prefieren mantenerse en «resguardo» dentro de un hotel porteño porque no cuentan con ninguna documentación y se sienten en peligro. Por el contrario, tienen prohibida la salida del país de manera legal hasta que se compruebe si efectivamente planeaban un ataque terrorista o no.