Este miércoles, Mario Draghi exigió la unidad de su amplia coalición como precio para seguir siendo primer ministro de Italia, después que el presidente rechazara su dimisión la semana pasada tras una disputa en el Gobierno. «¿Están los partidos y ustedes, los parlamentarios, dispuestos a reconstruir este pacto?», expresó Draghi ante la Cámara Alta, añadiendo que eso era lo que exigían los italianos.
El premier expuso una serie de problemas a los que se enfrenta el país, desde la guerra en Ucrania hasta la desigualdad social y el aumento de los precios y manifestó que los partidos políticos debían apoyarle si va a seguir al frente del Ejecutivo hasta las elecciones previstas para el primer semestre de 2023.
Draghi presentó su renuncia la semana pasada, después que el grupo populista Movimiento 5 Estrellas (M5E) se negara a respaldar la múltiple coalición de Gobierno de Italia en una moción de confianza parlamentaria. El presidente Sergio Mattarella rechazó la dimisión y le pidió que volviera a presentarse ante el Parlamento para reactivar el Gobierno hasta el final de la legislatura.
El expresidente del Banco Central Europeo cuenta con suficientes apoyos para seguir en el cargo sin el M5E, pero hasta ahora ha rechazado esa opción porque su mandato original era liderar una coalición de unidad nacional con partidos de todo el espectro político, informó Reuters.
Complicando aún más los esfuerzos por superar las divisiones, el partido ultraderechista Liga y sus aliados de Fuerza Italia han dicho que no quieren seguir compartiendo el poder con el M5E. Si Draghi decide que el Gobierno no puede continuar, es probable que el presidente convoque elecciones en septiembre u octubre.
