Desde que se retiró Martín Palermo en 2011, a Boca le costó encontrar un reemplazante que esté a la altura. El puesto de centrodelantero fue un problema para el Xeneize durante varios años. Hasta que llegó Darío Benedetto. Ahora el «Pipa» es la referencia del club de la Ribera en el puesto, pero el «Titán» aprovechó una pregunta sobre él para marcarle un detalle: «Le bajaría un poquito el perfil».
Consultado por el presente de Benedetto en el equipo, Palermo le pidió a Darío que baje un poco los decibeles en la cancha. «Yo creo que el Pipa se consolidó en su lugar. Es un jugador importante para el ataque de Boca. El liderazgo lo tiene que tener por lo que transmite adentro de la cancha. Después a veces le bajaría un poquito el perfil en esto de pelearse todo el tiempo. Se expone mucho. A mí también me pasó…«, dijo.
Si bien no son amigos, ambos tienen una relación especial. Sobre todo porque Benedetto considera a Palermo uno de sus grandes ídolos. Siempre lo observó y siguió su carrera como chincha. «En lo personal me pone muy contento cuando me comparan con Palermo, pero trato de mantenerme al margen. Palermo va a haber uno solo porque las cosas que logró con Boca es difícil que alguien las vuelva a repetir», dijo el Pipa hace un tiempo.
Palermo sobre Vidal
En cuanto a la posibilidad de que Arturo Vidal llegue a Boca como refuerzo de lujo, Palermo se animó a ponderar esa llegada. «Vidal es un jugador para Boca. Es un futbolista de gran calidad, es indiscutible eso. Si yo fuera Vidal vendría a Boca. Además, sería pensando a futuro. Lo haría como algo prolongado, no para venir un año, jugar la Copa e irse, Boca lo tiene que pensar a futuro. Es un futbolista para potenciar el club», dijo.
«La dirigencia y el entrenador deben consensuar. Es el club el que puede decir ‘no estamos al alcance de Vidal, no me lo pidas más’ o sí», fue la postura de Palermo sobre esta negociación con el mediocampista chileno. ¿Cómo está la situación? El jugador ya tiene la propuesta de parte de Boca, ahora solo queda que tome una decisión: su salida del Inter de Milán no es complicada, por lo que todo depende de él.
