El incendio en el Santuario de Nuestra Señora de Lourdes ubicado en Francia produjo la quema de tres de las siete capillas disponibles. En un principio se pensaba que se trataba de un acto de vandalismo, pero las últimas investigaciones apuntan a un accidente. En el lugar los pelegrinos depositan velas como culto a la Virgen María.
«Durante la noche del sábado al domingo se produjo un incendio en las capillas de luz del Santuario. Aunque los daños materiales son muy importantes, quedan 4 capillas accesibles a los peregrinos que deseen depositar una vela durante su peregrinación», señalaron desde la cuenta oficial de Twitter de la administración y cuidado del santuario.
Por suerte, el fuego fue controlado por los bomberos y no hubo mayores pérdidas, sin embargo, estiman que la reconstrucción podría costar hasta 1,5 millones de euros. Las capillas dañadas están situadas al costado del río que atraviesa el espacio del santuario. Justamente, las dos últimas son las que se han usado hasta el momento para colocar los velas de mayor peso y tamaño, por lo que si infiere que podría haber sido la causa de los daños.
Olivier Ribadeau Dumas, el rector del santuario y vicario episcopal de París, afirmó que no hubo heridos en el lugar y que los fieles van a poder rezar en las capillas que quedan. Por otro lado, el área que compone el predio religioso tiene 52 hectáreas con 22 lugares de culto, que suelen visitar más de 6 millones de personas al año casi de manera ininterrumpida.
El lugar cuenta con 297 empleados fijos. La zona más afectada fue inaugurada en 2018 y además una de las imagenes de la Virgen que está colocada junto al río mirando hacia las capillas también fue fuertemente dañada. Se calcula que unos 380.000 kilos de velas se consumen por año en las capillas, por lo tanto, es una zona muy simbólica para los católicos.
