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POLÍTICA

Hebe de Bonafini volvió a la carga contra Gabriela Cerruti: “Es de cuarta esa mina”

Tampoco se salvó el presidente Alberto Fernández ni el ministro de Economía, Sergio Massa.

Hebe de Bonafini

La titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, volvió a la carga contra la portavoz presidencial Gabriela Cerruti. Ya lo había hecho en febrero de este año, pero en esta ocasión, la activista de Derechos Humanos fustigó a la exdiputada nacional por decir “huevadas”. En este sentido, la consideró una “mina de cuarta”. Las esquirlas de Hebe también impactaron en el ministro de Economía, Sergio Massa.

“Yo no lo quiero (a Massa), no me gusta nada lo que está haciendo. Si te cuento lo que aumentaron las cosas…”, remarcó De Bonafini en diálogo con Minutos Contados (AM 530). Y graficó: “Es como los yanquis que les pegaban a los chicos en las escuelas y ahora aprobaron la ley de pegarles a los chicos en la escuela de nuevo. Ahora pusieron a Massa y nos ajusta más y más, es peor que el otro que estaba”, en clara alusión a Martín Guzmán.

En esta línea, la titular de Madres le reprochó al Gobierno nacional que “nadie dice nada y todo vale una fortuna”. “Cuando viene la señora a mi casa, me dice lo que tiene que pagar, un litro de aceite 800 pesos, cuando tenemos maíz y girasol que se lo comen los chachos de los chinos, que les dan el maíz y el girasol nuestro”, aseveró De Bonafini.

Por otra parte, habló sobre la unión entre los espacios kirchneristas y los que representan al peronismo. Aunque hizo una salvedad: “Yo creo que estamos unidos más allá del presidente Alberto (Fernández). La gente quiere la unidad con los que nos gustan y no nos gustan, pero eso es muy difícil”, objetó la impulsora de Derechos Humanos

“No podés unirte con un tipo que cada vez que abre la boca, mete la pata”, disparó, aludiendo al jefe de Estado. Y continuó: “Que no me hagan hacer creer eso que tenemos que ser todos buenos. La gente quiere defender a (la vicepresidenta) Cristina (Kirchner). Que no me vengan con la unidad. Si el enemigo se pone de punta, y el que tiene que estar al lado de nosotros, no está al lado de nosotros, se parece más al enemigo que a nosotros”.

Siguiendo con los cuestionamientos, De Bonafini, sin filtro, disparó: “El Presidente dice que hay que ser bueno y pagarle al Fondo Monetario Internacional. A mí me chupa un huevo el Fondo. Dice que hay que estar bien con todos, va a los canales y lo cachetean mientras Massa avanza a pasos agigantados, y los jubilados estimamos que no podemos más”, insistió.

Por último, fue que tampoco se salvó Cerruti. “La gente tiene que perder el miedo. Me gusta que la gente dice todo (los manifestantes frente al domicilio de la vicepresidenta en Recoleta). Y me da bronca que hablan los que no tendrían que hablar, como la delegada del Presidente, Cerruti. Hablaba y hablaba, agarraba todos los micrófonos y decía cada huevada, es de cuarta esa mina, qué me va a gustar”, se quejó.

El antecedente entre Hebe de Bonafini vs. Cerruti

En febrero último, la titular de Madres y la portavoz de la Casa Rosada ya habían tenido un episodio particular. Todo surgió a partir de que Hebe reveló que Cerruti la visitó en su casa para convencerla de que suavizara sus críticas a la gestión de Fernández por la inflación y la situación de los jubilados y pensionados. De Bonafini no se tomó de la mejor manera el proceder de Cerruti, por lo que la terminó echando.

En un video en redes sociales, la referente social contó que Cerruti la llamó y le dijo que “estaba equivocada” y, ante ello, “quería verla el martes a la mañana”. Según el relato de De Bonafini, la vocera presidencial le decía que “nada va a aumentar, que todo está bien, que el arreglo con el Fondo es bárbaro”. “Me discutía que no, que no, que no… Yo levantaba la voz”, afirmó la titular de Madres.

“Me dio vergüenza que la vocera presidencial haya venido a la casa de las Madres para cambiarme la idea, para decirme de que estoy equivocada y, después, ella no dijo una palabra de ese encuentro”, continuó De Bonafini, y sentenció: “Discutimos muy fuertemente hasta que al final le dije que se fuera, y se fue muy enojada”.

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