La pirámide social hoy representa una Argentina que es atravesada por otra crisis económica. Solamente el 5% de los hogares es considerado de «altos ingresos», mientras que el 30% oscila entre la indigencia y la pobreza. Dentro de la clase media, se divide en tres estratos sociales, de los cuales la mayor población se ubica en el sector de clase media baja.
«Cuando en un hogar ingresan 800.000 pesos tiene que saber que es parte de 1 de cada 20 argentinos que son de clase alta. La mitad de las familias argentinas ganan de 150.000 pesos para abajo», señaló el periodista que presentaba la noticia en La Nación+. El comunicador compartió un gráfico de la consultora W que explica detalladamente el fenómeno social.
El hogar tradicional de 2 adultos mayores y dos menores es pobre si gana en promedio 55.000 pesos mensuales; es clase baja si logra perforar los 100.000 ingresos, es clase media baja si supera los 150.000 y clase media alta si logra conseguir $300.000 al mes. Podría decirse que el 45% de los hogares argentinos son de ingresos medios.
El 22% de los hogares en la Argentina son considerados de ingresos medios altos o directamente altos si obtienen ganancias entre los 300.000 a los 800.000 por mes. Tras la crisis del 2001, la clase media no ha recuperado el bienestar económico y ha sido marginada a la clase baja o media baja. Esto sumado a las grandes devaluaciones del peso con respecto al dólar que hubo en los últimos 4 años.
«Hoy en dólares (a cotización CCL) en salarios estamos en una línea que nos asemeja al 2003, saliendo de la hipercrisis del 2001. El sueldo bruto hoy en dólares en promedio es de 561 dólares, pero en la época del Gobierno de Néstor Kirchner, entre 2003 y 2007, era de USD631», expresó el conductor del noticiero tratando de interpretar la realidad social y económica de los argentinos.
