La guerra más inesperada fue la que estalló hace tan solo algunos días, cuando Baby Etchecopar en su programa de Radio Rivadavia apuntó contra El Dipy, quien había criticado su actitud en torno a la salida de Viviana Canosa de A24. Ahora, el cantante que también tiene un programa en la misma emisora, salió con los tapones de punta y rompió en llanto.
«El Dipy aconsejó que yo me tendría que haber ido de A24 en solidaridad con Viviana Canosa. La verdad, Dipy, te digo en serio, flaco, vos no sos del medio. ¡sos bailantero! Vos tenés que subir a cantar bailanta. ¡No sos del medio! Vos sos una falsa copia mía. Dipy no representa al pueblo. Dipy anda en un Mercedes Benz que raja la tierra. A ver si me entendés. No es el nene pobre que dice ‘no tengo cortinas en mi casa’. No mientan. ¡No mientan!», había lanzado Baby.
La respuesta de El Dipy no tardó en llegar. «A mí me importa que el país salga adelante por mis hijos. Y a mis hijos les enseño que, si quieren salir adelante, tienen que trabajar. Me duele, te juro que me duele en el alma, se me caen las lágrimas porque me rompí el cul* para llegar acá. Y si yo tendría que hablar de Baby Etchecopar, estoy acá una hora, de todo puedo decir. Pero, para mí, sigue siendo mi compañero de radio. Para él, no», apuntó.
«Entonces, estoy pensando seriamente si seguir trabajando en esta radio. Yo soy un pibe laburante. Baby no tiene ni la más put* idea de lo que es vivir en la calle. Yo sí viví en la calle. ¿Y sabés lo que tengo? Todo lo que tengo me lo gané, todo, absolutamente todo. Así que lamentablemente, estoy pensando seriamente esto. Me cansé. Dos años, chicos. Hace dos años que trabajo en esta radio, y hace dos años que me castiga sin parar. Después, te dice que te quiere, que te estaba jodiendo. Me harté», lanzó dejando a todos con la boca abierta.
«Jamás me metí con los dueños, con mis compañeros ni con los trabajadores de esta radio. Y yo esperaba lo mismo. Pero se ve que hay una persona que no. Yo no voy a seguir haciendo radio hasta que este hombre me pida disculpas de todo lo que me ha hecho durante un año y ocho meses sistemáticamente, sin parar, castigándome, todavía no sé por qué. Creo que es por una cuestión de respeto, porque lo merezco porque soy un compañero de trabajo», sentenció El Dipy.
