Rusia prohibió a los inversores de los llamados «países no amigos» vender acciones en determinadas empresas estratégicas hasta finales de año, según un decreto presidencial firmado este viernes por el presidente Vladimir Putin. La prohibición aplica a las participaciones en la explotación de petróleo y gas Sajalín-1, en el Extremo Oriente ruso.
Su operador, la empresa estadounidense ExxonMobil, dijo esta semana que estaba en proceso de transferir su participación del 30% a otra parte. El decreto prohibición de inversiones, que entró en vigencia este mismo viernes, también incluyen el proyecto de gas natural licuado (GNL) Sajalín-2 y el yacimiento petrolífero de Kharyaga, así como en los bancos rusos, entre otros activos.
La lista de bancos debe ser preparada por el Gobierno y el banco central para la aprobación de Putin. Los italianos UniCredit e Intesa, el grupo estadounidense Citi y el austriaco Raiffeisen siguen buscando opciones para abandonar Rusia, mientras que otros como Société Générale y HSBC han encontrado una salida, informó Reuters.
Estados Unidos y la Unión Europea impusieron un inédito paquete de sanciones contra empresas de Rusia de distintos sectores, con especial énfasis en petroleras, gasísticas y bancos, con el objetivo de sofocar su economía en represalia por la invasión militar a Ucrania iniciada el 24 de febrero.
