Andrés, expareja de Brenda Uliarte, manifestó que conoció a Fernando Sabag en 2018 y reconoció que siempre tuvo ideas extremistas y antisemitas. En ese marco, Andrés contó que vivió durante 6 meses en una de las habitaciones de Sabag y lo definió como una persona que nunca le importó las consecuencias que pudieran tener sus actos. El atentado en Recoleta contra Cristina Kirchner sigue desprendiendo nuevos datos escalofriantes del acusado.
«Yo lo conocí a Fernando a través de Brenda en 2018. Ella me dijo un día que había un amigo que iba a realizar una joda, entonces fui y lo conocí a Fernando. Yo tengo todos los chats para respaldar lo que digo. Brenda es una persona bastante frágil y manipulable y no muy inteligente al momento de tomar decisiones, por eso hizo la estupidez que hizo», comentó Andrés en una entrevista para La Nación+ con la conducción de Paulino Rodrigues.
«Con todas las cosas que están saliendo ahora, la verdad es que estoy conociendo otra Brenda que jamás pensé que podía llegar a estos extremos. Lo último que sabía de Brenda era que estaba estudiando la secundaria y que después quería estudiar medicina, que tenía un trauma por el hijo que se le murió», expresó el joven en una charla distendida en un parque de Villa Ballester.
«De Fernando no me sorprende, porque el tipo siempre quiso trascender. Lo conocía poco, pero el alquiler que ofrecía era barato. Lo que vendría a ser hoy en día un alquiler de 25.000 pesos salía 5.000, entonces era bastante barato y dije ¿Por qué no? Pero si hubiera sabido el trasfondo de Fernando no alquilaba ni de suerte. Me quedé 6 meses viviendo con él», explicó Andrés.
«La casa que tenía en Terrada tiene 4 habitaciones. En una vivía yo, en otra Fernando, un chico peruano con su chica y después un tiempo estuvo su prima y después me fui. Fernando es un payaso sin sueldo, un fracasado existencial, una persona que pese a que su madre le dejó 3 autos, una casa y dinero, para que pueda salir adelante, pero el tipo tenía lo que yo denomino complejo del Sultan», insistió el examigo.
«Fernando manipulaba una persona para cada tarea. Fernando siempre expresaba su odio bastante fuerte hacia los judíos que lo fundamentaba con un montón de estupideces. En un momento había comentado que en el pasado estuvo en sectas religiosas un poco extremistas u oscuras como los umbandas que sacrifican animales y alardeaba sobre esas cosas como si fuera algo digno de respeto», aseguró.
«Nunca le importó las consecuencias y siempre le chupaba todo un huevo. La verdad no sé si la quiso matar o no la vicepresidenta de la Nación. Yo hace 4 años que no lo veo y sé que muchas partes de él siguen siendo igual o peores de lo que conocía. Una persona que tenga más de 30 años para que cambie por completo el patrón de actitudes en la vida cuesta muchísimo», concluyó.