El primero de septiembre se vivió uno de los hechos más escalofriantes desde la vuelta a la democracia. Fernando Sabag Montiel, un hombre de nacionalidad brasileña de 35 años, gatilló frente a los ojos de Cristina Kirchner, vicepresidente de la Nación, en dos ocasiones. La bala no salió y la exmandataria terminó ilesa aunque la noticia dio la vuelta al mundo y la Justicia comenzó a investigar.
Tras la detención del agresor, comenzó una rueda de peritajes y allanamientos en su domicilio además de acusar también a su pareja, Brenda Uliarte. De la mujer pudieron acceder a la información de su teléfono a diferencia de su pareja y lo que encontraron allí fue contundente. La Justicia detectó que este mismo sujeto ya había intentado dispararle a la expresidente en la última semana de agosto.
Según la información brindada a Télam, el 27 de agosto Fernando Sabag Montiel estuvo presente en la concentración de Juncal y Uruguay, edificio donde vive la titular del Senado. Sin embargo, no logró ponerse frente a ella aunque confiesa que le tocó la espalda al gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, y que al no poder cumplir con su cometido se retiró del lugar.
Los mensajes de Fernando Sabag Montiel
El acusado, al no poder atacar a Cristina Kirchner, le envió mensajes a su pareja y se fue del barrio porteño de Recoleta. «No, ya se me metió adentro y el escenario, el anfiteatro lo sacaron. Le toqué la espalda a Axel Kicillof y se metió en un Toyota Etios, eh, y se fue, un quilombo. Ella está arriba pero no creo que salga, así que ya fue, dejá, voy para allá, quédate ahí. No traigas nada«, dice uno de los escritos.
«No, no es que se dé cuenta, el tema es que hay una cámara de C5N, y hay poca gente, y la gente se está yendo, y el momento es ese, ahora ya es tarde, o sea son las 12 y ella salió a esa hora, y era a esa hora, o sea el escenario era con ella porque la habrán seguido. Entendés? Después vamos a ver en la tele a ver qué pasó porque cuando ella se metió, la siguieron y ahí tendría que haber sido«, afirmó el sujeto en otro texto.
La nueva hipótesis
A raíz de esto, se desata un nuevo camino en la investigación de la causa aunque la Justicia ya trabaja en su propia alternativa. Teniendo en cuenta lo contundente que son los mensajes que recibió Brenda Uliarte, sospechan que Sabag Montiel llevó el día del ataque un teléfono que no sería su «línea principal». Esto se sustenta con que en el allanamiento en su casa encontraron material descartable, carcasas de teléfonos celulares y un disco rígido.
Como si eso fuera poco, la «carpeta segura» que hay en el celular de la mujer podría ser donde almacenaba la información cuando el agresor cambiaba de equipo. Es por ello que decidieron avanzar con el peritaje y comenzar a develar cada vez más mensajes que intercambiaron entre ambos aunque la jueza María Eugenia Capuchetti dictó nuevamente secreto de sumario.
