Ucrania exigió a la ONU que castigue a Rusia por su invasión y la despoje de su derecho de veto en el Consejo de Seguridad, por las atrocidades cometidas en el antiguo país soviético. La reunión del organismo tendrá lugar un día después de que Vladimir Putin ordenara la movilización de miles de rusos para luchar en la guerra.
«Se ha cometido un crimen contra Ucrania, y exigimos un castigo justo», expresó el presidente Volodímir Zelenski a los líderes mundiales en la Asamblea General de la ONU el miércoles. El mandatario pidió que un tribunal especial del organismo imponga un «castigo justo» a Rusia.
El Consejo no ha podido tomar ninguna medida significativa, porque Moscú es un miembro permanente con derecho a veto junto con Estados Unidos, Francia, Reino Unido y China. La reunión de este jueves será al menos la vigésima vez que el Consejo de Seguridad se reúne sobre Ucrania este año.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, se enfrentará a sus homólogos ucranianos y occidentales. Entre ellos, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken; el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, y el fiscal de la Corte Penal Internacional, Karim Khan. El Consejo de Seguridad está confirmado por 15 miembros, informó Reuters.
Ucrania, Estados Unidos y otros países han acusado a Rusia de crímenes de guerra en Ucrania. Moscú niega haber atacado a civiles durante lo que denomina su «operación militar especial». Describe las acusaciones de abusos contra los derechos humanos como una «campaña de desprestigio».
El miércoles entre Moscú y Kiev llevaron a cabo un inesperado intercambio de prisioneros, el mayor desde el inicio de la guerra. Entre los extranjeros liberados, figuran dos británicos y un marroquí que habían sido condenados a muerte en junio tras ser capturados luchando por Ucrania.
