Cada día que pasa, la investigación sobre el ataque armado a Cristina Kirchner avanza un poco más. La Justicia pidió la detención de Agustina Díaz, de 23 años, además de la de Fernando Sabag Montiel, portador del arma, y su pareja Brenda Uliarte que está acusada de ser cómplice y saber que el brasileño de 35 años quería dispararle a la vicepresidente de la Nación.
La jueza María Eugenia Capuchetti ordenó peritar el teléfono de la joven y allí encontró que Díaz también está relacionada a la causa. Dentro del celular halló mensajes entre ambas que agravan aún más el hecho y dejan en evidencia que hubo una inteligencia previa a la agresión y que los involucrados en el incidente son varias personas.
«Borrá todo», le pidió Agustina Díaz a Brenda Uliarte en una comunicación que tuvieron después de que el 1 de septiembre fuera detenido Sabag Montiel. Las pruebas contra la mujer de 23 años serán exhibidas antes de la declaración indagatoria que se realizará el jueves aunque fuentes judiciales le confesaron a Télam que hay mucho material incriminatorio.
Como si eso fuera poco, en otra conversación le recriminó: «¿Por qué falló el tiro? ¿Cómo mandaste a este tarado? ¿Se puso nervioso?», se preguntó. De esta manera, queda en evidencia que el intento de asesinato a Cristina Kirchner fue algo planeado, hablado y consensuado entre más de 3 personas ya que la banda de «Los Copitos» también incluye a otros tres hombres que aún son analizados.
La hipótesis del teléfono reforzada
En la Justicia sospechan que Fernando Sabag Montiel tenía más de un teléfono y que el incautado no era su línea principal. Cuando Díaz fue detenida en la ciudad bonaerense de San Miguel le secuestraron tres celulares de los cuales solo uno estaba activo además de un chip que estaría involucrado con más conversaciones con Brenda Uliarte.
