Desde hace algunos años, Julieta Prandi no la viene pasando para nada bien, debido a sus conflictos legales con Claudio Contardi, su ex y padre de sus dos hijos. Ahora, el encargado de hablar al respecto fue nada más y nada menos que Fernando Burlando, el reconocido abogado que se encarga de representarla ante la Justicia.
Esto sucedió en “Intrusos”, donde habló de las causas que llevan adelante. “Nosotros tomamos los intereses de Julieta hace muy poquito tiempo, la problemática es integral, familiar donde hay situaciones de todo tipo, delictivas, en toda esta trama. Hasta ahora no se habían denunciado ciertas cuestiones que están a la luz y documentadas hasta con escrituras públicas, con las consecuencias que eso le va a traer al ex de Julieta y muchos otros protagonistas que facilitaron este tipo de maniobras”, aseveró.
“En todo esto siempre estuvo algo ausente, la perspectiva de género. Ni los funcionarios ni quienes manejaron los intereses de Julieta lo tuvieron en cuenta. Además de la violencia hay situaciones que son un bochorno y, raramente, la justicia no las había tenido en cuenta. Yo creo que, a veces, los litigios entran en una situación de viscosidad. Hay confidencialidad sobre el tema de familia; sin embargo, no es así con respecto a todas las cuestiones ilícitas que su ex manejó, manipuló y ejerció sobre Prandi”, apuntó Fernando Burlando.
Tajante
“Entre ellas, la desapoderaron por completo no sólo de dinero sino también de bienes inmuebles. Situaciones que están reflejadas en pruebas contundentes. Creo que se abre una nueva etapa en la vida de Julieta”, aclaró el abogado y se refirió a la decisión de Julieta de denunciar al hijo de Contardi. “Ese inmueble de Avenida Libertador supuestamente iba a ser vendido para adquirir una casa. Eso es lo que se muestra inicialmente”, aclaró.
“El departamento termina a nombre del hijo de Contardi, y la casa que iban a comprar con la venta de este inmueble termina a nombre de Contardi y de su mamá. Hay pruebas muy contundentes. Como conversaciones entre ellos reconociendo esto. Esto tiene que ver con la voluntad o no voluntad de participar o no de un delito. Si uno no quiere participar, algo que es ajeno lo devuelve. En este caso no ocurrió, entonces tenemos que apuntar a quien es el auto de la maniobra y también a su entorno familiar. Estamos intentando evaluar la conducta de todos, incluso del escribano que participó», sentenció Burlando.