Después del intento de magnicidio sufrido por Cristina Kirchner, la Basílica de Luján se convirtió en el escenario de una misa en apoyo a la vicepresidenta y a favor de la paz social. Desde el Gobierno, habían afirmado que la misa del sábado pasado se realizaba para unir a los argentinos más allá de las ideologías políticas y que podía ser visto como un mensaje de unión. Y aunque desde la oposición negaron haber recibido invitaciones, Franco Flexas, intendente radical del partido bonaerense de General Viamonte, aseguró que concurrió a la ceremonia para «abrirse al diálogo».
Esta mañana, Flexas manifestó que participó en la misa en Luján porque el camino de la Unión Cívica Radical es debatir ideas. «Es condición para un gobernante que esté siempre abierto al diálogo y eso intento expresarlo. Por eso fui a la misa como también he hecho otros actos. El camino del radicalismo y el legado que tenemos es el de apertura, de diálogo, de mejorar la institucionalidad. Estemos en el Gobierno o afuera del Gobierno», dijo Flexas en declaraciones a Télam.
El intendente radical advirtió que las diferencias políticas no deberían impedir encontrar «espacios de diálogo» y mencionó como ejemplo la relación que mantiene con Axel Kicillof. «Más allá de las diferencias que pueda tener con el gobernador, fue elegido por más de la mitad de la población de la provincia de Buenos Aires. La gente lo ha elegido como gobernante de todos y esa es la responsabilidad que nos cabe», manifestó.
En el mismo sentido, Flexas se refirió al termómetro social de cara a las elecciones del próximo año. «La gente va a pedir cada vez más diálogo. Si bien se suele escuchar a los más ruidosos, los dos puntos extremos, tanto del Frente de Todos como de Juntos por el Cambio, la inmensa mayoría quiere empezar a bajar los decibeles y los dirigentes tienen que estar a la altura«, aseguró.
En cuanto al candidato de la oposición para las elecciones en la provincia de Buenos Aires, Flexas indicó que espera que sea un radical. «Necesitamos más diálogo para lo que viene. Primeramente más consensos. Hay que llevar realmente políticas públicas de largo plazo y, para eso, hace falta sentarse en la misma mesa. Porque no se viene una Argentina fácil, y la Argentina que viene no puede tener extremos. Tiene que tener un momento donde haya conciliación«, expresó.
El intendente radical también se refirió a los polémicos cánticos partidarios al terminar la misa. «Yo, en la parte que asistí, estuvo la misa. Y unos minutos después se mantenía la misma. Por supuesto que tenía un condimento donde la mayoría era gente del oficialismo. Pero no vi un acto político. Sí, vi en las redes algunos videos donde había cantos y todo. Y creo que ahí tiene que hacerse una reflexión de algunos dirigentes del peronismo, donde tienen que diferenciar lo institucional de lo partidario«.
Y concluyó: «Haber cantado en ese lugar, no fue apropiado y termina sacando de foco la consigna que se tenía. Creo que algunos dirigentes tienen que hacerse responsables para que los nuevos llamados institucionales sean por los caminos que tienen que ser, y para que no haya ningún condimento político partidario. Porque es político, pero no político partidario».