(Por Matilde Sera).- El gobernador de la provincia de Jujuy, Gerardo Morales, está en plena campaña presidencial. Según dijo y repitió, varias veces, su intención es llevar el modelo de Jujuy a todo el país. Por eso inició una recorrida por varias provincias contando la maravillosa transformación de Jujuy. Pero, últimamente, los números no le están jugando una buena pasada. Esta vez un medio que se dedica a chequear los discursos de los políticos, descubrió que usa cifras viejas para ponderar su gestión.
El mandatario fue parte, por medio de una videoconferencia, del Encuentro de Mujeres Radicales. Allí, tiró varios datos, algunos de los cuales no se condicen con la realidad actual de la provincia que gobierna. El Gobernador dijo que el desempleo en el país es del 7%, mientras que en Jujuy esa cifra apenas alcanza el 4,2%. Lo que no esperó Morales es que alguien chequeara los datos y se encontrara con la “trampa” del precandidato presidencial.
Los datos que utilizó el titular del Poder Ejecutivo de Jujuy son reales, pero son viejos. Corresponden al último trimestre del año 2021. Los datos más actuales que publicó el Indec indican que el desempleo a nivel nacional bajó, mientras que ese mismo índice aumentó en Jujuy casi un punto y medio. Hoy el organismo estadístico indica que, en el país, la desocupación alcanza el 6,9%, mientras que en la provincia norteña es de 5,6%.
Chequeado, el sitio que se dedica a analizar discursos de políticos consideró que el dato que lanzó Gerardo Morales era engañoso, de acuerdo a su método de calificación. Al parecer, el modelo Jujuy de Gerardo Morales no es tan exportable como pretende mostrarlo el Gobernador. Al menos por ahora, los números no lo ayudan. Es el dirigente opositor con menor imagen positiva y los mejores números de su provincia desmejoran conforme pasa el tiempo.
La canasta básica, por las nubes
La inflación en Jujuy no da tregua y en lo que va del año, la canasta básica alimentaria en la provincia norteña acumula una suba del 82,6%. Es decir, que una familia tipo jujeña necesitó $128.540,95 para no ser pobre; y $61.248,69 para no ser indigente. La suba fue de más de seis mil pesos, respecto al mes anterior, un número realmente alarmante y mucho más si se tiene en cuenta que en lo que va del año (nueve meses) la suba fue de $44.729.