Ucrania anunció que sus fuerzas han retomado más asentamientos en Jersón, una de las cuatro regiones parcialmente ocupadas por Rusia que el presidente Vladimir Putin incorporó formalmente al país, en la mayor anexión de territorio en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Con los rusos militares retirándose de las líneas del frente en el sur y el este del país, el mandatario Volodímir Zelenski expresó que Novovoskresenske, Novohryhorivka y Petropavlivka, al noreste de la ciudad de Jersón, habían sido « »liberadas». Esta semana, Putin firmó una ley para incorporar cuatro regiones ucranianas, entre las que se encuentra Jersón.
Kiev dice que nunca aceptará una toma ilegal de su territorio por la fuerza. Ucrania y Occidente dicen que los referendos fueron votaciones amañadas fundadas a punta de pistola. La nueva ley incorporaría a Rusia alrededor del 18% del territorio ucraniano. Putin dice que quiere garantizar la seguridad de su nación y proteger a los rusoparlantes su vecino país.
La decisión de Moscú de anexionarse las regiones plantea la posibilidad de una escalada de la guerra, ya que Putin y otros mandatarios han dicho que podrían utilizar armas nucleares para proteger el territorio ruso, incluidas las regiones anexionadas, informó Reuters.
El ejército ucraniano dijo que sus fuerzas en el sur habían matado al menos a 58 combatientes rusos, destruido nueve tanques, 17 vehículos blindados y cuatro obuses. «Durante la noche, siete misiles rusos impactaron en la ciudad de Zaporiyia, dañando o destruyendo varios edificios y provocando incendios y heridos», dijo el gobernador regional, Oleksandr Starukh. «Los equipos de rescate ya están sacando a la gente de entre los escombros», agregó.
