Con los cambios en el porcentaje de movilidad jubilatoria que anunció la titular de ANSES, Fernanda Raverta, hubo cambios en el área de monotributo. Ahora los límites de facturación son otros y las recategorizaciones que se llevarán adelante en enero del 2023 se verán ajustadas por los ingresos brutos de cada categoría, el cual tiene un promedio de 33,55%.
Con estas variaciones, los límites de facturación para la Categoría H quedaran en un límite de $5.648.259,13 según difundió NA. Para pasar al Régimen General y convertirse en Responsable Inscripto la venta de cosas muebles deberá ser de $8.039.330,30 o más, una cifra que alcanzaría a la Categoría K de este grupo de personas reguladas por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
Solamente para las categorías A, B y C, las más bajas, la suba anual del límite de facturación superó al aumento de la inflación. Las mismas habrán mantenido los límites reales o se encontrarían con una mejora en comparación con las variaciones del 114,39% contra el aumento del IPC que cerrará el año en un monto menor, o al menos eso se espera.
Para el resto de las categorías, es notoria la disparidad entre el sentido que tienen un ajuste de la facturación de 72,44% o 93,42% anual (solo para la D) contra una inflación cercana al 100% para diciembre del corriente año. Esto marca 30 puntos porcentuales de variación que hará que contribuyentes suban de categoría para enero próximo, cuando haya recategorizaciones.
Cabe mencionar que el monotributo pierde vigencia el próximo primero de enero aunque, el Senado de la Nación convertirá en Ley la prórroga por cinco años que ya tiene media sanción de la Cámara de Diputados. Así se estirarán los plazos y estos regímenes seguirán vigentes por otro periodo de tiempo más.
