La vicepresidenta Cristina Kirchner apuntó este sábado contra la Corte Suprema de Justicia de la Nación por el conflicto del Consejo de la Magistratura. A través de sus redes sociales, la titular del Senado compartió una columna de opinión del diputado nacional Leopoldo Moreau, publicada por el diario Página|12. Allí, el legislador describe la responsabilidad del máximo tribunal y de su titular, Horacio Rosatti, en la paralización de la Magistratura.
“En solo cuatro párrafos, la verdad de la milanesa sobre la responsabilidad de la Corte en el conflicto institucional. Clarísimo el diputado Leopoldo Moreau”, escribió la dos veces jefa de Estado en su cuenta oficial de Twitter, acompañando el mensaje de cuatro capturas de pantalla en las que se puede leer el artículo, titulado “El escándalo que provocó la Corte Suprema”.
En este sentido, el diputado nacional del Frente de Todos recordó que “en más de una oportunidad” se ha señalado “la peligrosa escalada que vienen protagonizando las máximas instancias del Poder Judicial”. Para Moreau, los integrantes del máximo tribunal se entrometen “en las facultades propias del Poder Ejecutivo Nacional y del Poder Legislativo”.
“A veces, esta intromisión toma la forma de medidas cautelares que paralizan o neutralizan decisiones adoptadas por el Poder Ejecutivo Nacional, orientadas a beneficiar el interés general”, señaló el también titular de la Comisión Bicameral de Seguimiento de las Actividades de Inteligencia. Y denunció que en otros casos “la Corte Suprema se subroga facultades del Poder Legislativo en franca violación de aquellas que le otorga la Constitución Nacional, con una severa afectación del estado de derecho”.
“Es el caso concreto del diseño de un fallo judicial dirigido a configurar un nuevo formato para el Consejo de la Magistratura”, escribió Moreau. La Corte Suprema declaró en diciembre del año pasado inconstitucional la reforma del Consejo de la Magistratura que redujo en 2006 de 20 a 13 la cantidad de integrantes del órgano encargado de nombrar y remover a los jueces.
El máximo tribunal le dio al Congreso un plazo de 120 días para sancionar una nueva norma sobre la composición del Consejo de la Magistratura. Ese límite temporal el Poder Legislativo no lo cumplió. En consecuencia, la Corte Suprema ordenó restablecer la norma que estaba vigente hasta 2006. Ahora, el Consejo tiene 20 integrantes y lo preside el juez Rosatti, presidente de la Corte Suprema.
“Más allá de declarar después de 16 años de vigencia la inconstitucionalidad de la ley con la que este órgano funcionó a lo largo de todos esos años, la Corte Suprema en lo que parece una decisión incluso hecha a medida de su propio titular, resucitó para asombro de una amplia mayoría de juristas una ley que había sido derogada por el Congreso Nacional”, puntualizó Moreau.
Para el diputado, el máximo tribunal logró asumir “facultades legislativas que le están expresamente vedadas de ejercer, dando origen a un conflicto de poderes”. Moreau sostuvo que a partir de este “desatino jurisprudencial”, la Corte pretendió “interpretar las reglas de funcionamiento y decisorias de ambas cámaras del Congreso, ejercitando una especie de poder de policía sobre los reglamentos que rigen su funcionamiento”.
Moreau se refirió a que en la actualidad la Magistratura no tiene representantes del Congreso por el cuestionamiento de la Corte a la división del bloque del Frente de Todos en el Senado, que reclamó la representación por la segunda minoría. Por medio de una acordada firmada por Rosatti y sus pares Carlos Rosenkrantz y Juan Carlos Maqueda, el máximo tribunal dispuso la incorporación a la Magistratura de los cuatro representantes de Diputados, cuya jura finalmente tendrá lugar el miércoles 21 de diciembre.
Sin embargo, aun tiene en consideración el pleito abierto por los senadores nacionales designados para el Consejo. “En estos días en los que el Poder Judicial transita el escándalo más bochornoso del que se tenga memoria a lo largo de la historia, resultaría más sano para reconstituir su prestigio que la máxima instancia de los Tribunales se volcara a ejercitar su facultades de superintendencia”, se remarca en el texto firmado por Moreau.
El artículo firmado por el diputado nacional frentetodista de extracción radical cierra llamando a “poner en orden las graves inconductas éticas y morales que más allá de las consecuencias penales que esos comportamientos pueden traer aparejadas restituya la dignidad y la independencia de la magistratura en todas sus instancias”.