Pampito Perello sorprendió a sus seguidores al hacer una tradición europea: "No me maten" ESPECTÁCULO El Intransigente

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Pampito Perello sorprendió a sus seguidores al hacer una tradición europea: «No me maten»

El periodista sorprendió en las redes sociales al mostrar lo que decidió hacer durante sus vacaciones.

Sin lugar a dudas, Pampito Perello está cerrando uno de sus mejores años. Es que, tuvo mucho trabajo, en Ciudad Magazine y en El Trece. Por lo que, para terminar el año, el periodista de espectáculos decidió tomarse unas especiales vacaciones, y viajó a Europa. Mientras se encuentra allí, sorprendió a sus seguidores al hacer una particular tradición europea.

Desde que Pampito Perello se tomó un avión hacia Europa, decidió compartir todos los detalles de sus vacaciones en las redes sociales. Es por esto que, días atrás, mientras se encontraba en Dublín, compartió una tradición europea muy particular. «Esta es la estatua de Molly Malone, que es muy típica de acá, tiene canciones hechas, de todo», comenzó compartiendo.

Luego, sorprendió al anunciar: «Dicen que hay que tocarle las tetas para que traiga suerte… No me maten las feministas, es una tradición de acá. Hay que tocarle las tetas para que te traiga suerte y volver a Dublín». Sin dudarlo, el periodista de espectáculos mantuvo su postura, y afirmó: «Yo se las toqué siempre que vine, y volví, así que funciona, me parece».

Posteriormente, continuó paseando, y compartió con sus seguidores: «Este es el Trinity College, es una de las universidades más antiguas. Ese campanario que está ahí tiene dos historias. Primero, no se puede pasar por el medio, porque, el que pasa, como están pasando ese chico… ese nene no se va a recibir nunca en su vida. No se recibe de nada, trae mala suerte».

«La otra es que, el que se trepa al campanario, y toca la campana, se convierte automáticamente en el rector del Trinity College. Un poco de cultura…», comentó Pampito Perello. Entonces, continuó mostrando algunos detalles de la ciudad, como una iglesia que la convirtieron en bar, o la fábrica de Guinness, que es la cerveza más famosa de Irlanda. Por último, compartió que fueron a un parque, a las afueras de la ciudad, donde hay ciervos sueltos, y se sacó algunas fotos cerca de los animales.

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