Desde que comenzó ‘Gran Hermano‘, se llevó todas las miradas. Es que, el reality logró cautivar al público, que todas las noches ven el programa que conduce Santiago del Moro, para enterarse de todo lo que sucede dentro de la casa. En la emisión de ayer, del debate, conversaron sobre lo que sucede con Ariel, y Sol Pérez no dudó en expresar su indignación al aire.
Durante la emisión de ayer del debate de ‘Gran Hermano’, uno de los principales temas fue la actitud de Ariel dentro de la casa. «Para mí es una persona que es invisible dentro de la casa», comentó Santiago del Moro. A lo que Coti expresó: «Yo pienso que él entró con ese personaje, para que la gente de afuera lo apoye». Entonces, Costa hizo referencia a su sobrepeso y afirmó que «lo que él pedía era un gesto de empatía».
Rápidamente, Ceferino Reato le preguntó qué haría ella en lugar de Ariel, «porque yo lo veo dejado». A lo que Costa sentenció: «Yo siempre digo lo mismo, ¿Qué es primero? ¿la obesidad o la depresión?». A lo que Santiago comentó: «La crítica que siempre se le hacía a ‘Gran Hermano’ es que eran cuerpos hegemónicos. Cuando entra una persona que tiene un peso por encima de lo que se ve en televisión, molestó». Sin dudarlo, Ceferino Reato comentó que «si Marcos tuviera el físico de Ariel, ya no caería tan bien».
«Yo creo que el rechazo que tuvieron hacia él es el mismo que tiene la sociedad, por eso decimos que ‘Gran Hermano’ es una sociedad. La misma mirada que tienen afuera, la tienen adentro», afirmó Laura Ubfal. En ese momento, Gastón Trezeguet expresó: «Para mí no tendríamos que hacer tanto énfasis en que es gordo, me parece que no hay que victimizarlo. A mí me parece que la persona Ariel es la que molesta, no si es gordo, flaco».
Sin dudarlo, Sol Pérez afirmó que piensa igual que su compañero. Entonces, Santiago del Moro hizo referencia a las imágenes de Ariel cambiándose en el jardín, y Sol decidió expresar su indignación. «El problema no es si él va al cuarto, se saca la ropa y se cambia. El problema es que se sienta desnudo en una silla donde vos después te sentas a comer. Yo no tengo por qué, si estoy conviviendo, sentarme en una silla donde él apoyó las pelotas», sentenció la panelista.
«A mí no me gustaría de nadie, ni de una mina, ni de un chabón… Me parece que es respeto por el otro», aclaró Sol. Luego, afirmó que «tus derechos terminan donde empiezan los del otro». Entonces, expresó: «Me encantaría que pase en la sociedad, que uno no intente conocer a las personas o relacionarse por el cuerpo que tienen… Siento que el juego de Ariel no se puede criticar por su peso, y no me gusta eso».