Muy fuerte. Así es todo lo que se ha desatado en torno a Julieta Poggio, una de las participantes que más viene dando que hablar dentro de Gran Hermano, el programa que lleva adelante Santiago del Moro a través de la pantalla de Telefe. Esto tiene que ver con las declaraciones de la joven modelo y actriz sobre una de sus mascotas.
Delante de sus compañeros, aseguró que no quiere a su perra llamada Mía e incluso llegó a preguntarse si se habría muerto. Esto generó la reacción de los usuarios en las redes sociales, quienes salieron a liquidarla, por lo que su madre Patricia Destefani tuvo que dar explicaciones. «Maltrato animal es otra cosa», aclaró la mujer.
«Mía es una perra que es distinta a lo que es el resto de nuestras perras porque de repente no es tan apática o no es juguetona. Nunca lo fue. Es una perra que siempre fue muy solitaria. De hecho, nuestros otros perros nunca juegan con ella porque es más tranquila», sostuvo la madre de la participante de Gran Hermano mientras tenía a su mascota en sus manos.
«Ella decide dormir sola y no con el resto. Pero nunca dejamos de cuidar a Mía. Mía tiene todos los cuidados que tienen nuestros otros perros porque nosostros los amamos. Tiene sus vacunas, su alimentación sana. ¿Qué entienden ustedes por maltrato animal? Maltrato animal sería si Julieta hubiese dicho ‘uh, yo no quiero tanto a Mía como a Roma o Ciro y entonces la dejo sola encerrada en un cuarto y no le doy comida o le pongo una gomita en el hocico para que no ladre o no la sacamos a pasear'», apuntó.
«Eso es maltrato animal», destacó la madre de Julieta Poggio, dispuesta a defender a su hija. «Todos los seres humanos tenemos más simpatía por nuestras mascotas o por nuestros amigos. Y el que diga que no, está mintiendo. Todos tenemos distintos afectos. De hecho, en el juego también se nota», finalizó frente a sus seguidores.
