Martita Fort viene de transitar una experiencia difícil tras la traumática muerte de su tutor legal, Gustavo Martínez. A un año del triste hecho, la joven brindó una entrevista en la que repasó su vida, sobre todo la infancia, junto a Ricardo Fort que falleció cuando ella era solamente una niña.
En la primera parte del reportaje, Marta reconoció que la vida estridente de su papá le resultaba tediosa: “Me hacía muy mal verlo tan público, tan de todos. Yo quería una vida privada con él, como la de cualquiera. Era muy chiquita cuando echaba a los fotógrafos con mentiras, diciéndoles que papá no había llegado, que no estaba, que se fueran».
“Todo eso le hacía mucho la cabeza. Se levantaba pensando: ´¿Qué puedo hacer hoy para que hablen de mí?´. Y entonces daba tiros para todos lados hasta explotar. Finalmente él reconoció ese desbande», rememoró la joven de 18 años y luego acotó: «Y sintió mucho arrepentimiento de haber perdido tanto tiempo pendiente de los medios y rodeado por quienes, quizás, no valía la pena, en vez de preocuparse por cuestiones internas. Por su salud. Por su familia. Su gran miedo era que la gente se olvidase de él».
El deseo de Martita
“Actualmente estoy bien. Ya la pasé. En septiembre hice un click. Dije: ‘para, no puedo estar así’ y ahí es cuando aprendí a pasarla y hacer las cosas que me gusten por más que duele», dijo primero sobre la repentina muerte de Martínez y luego confesó que le gustaría tener hijos en un futuro no tan lejano.
“Quiero ser mamá joven, como a los 22, 23, 24… Sé que sería una buena madre y me encantaría criar a una mini-Marta», expuso la hija de Fort sobre sus planes. Para finalizar, la jovencita explicó: «Aunque actualmente estoy más hetero que bi, pero qué sé yo ¡Cuando pinta, pinta!”.