Un momento realmente inesperado fue el que se vivió en “A la Barbarossa”, el programa que lleva adelante Georgina Barbarossa a través de la pantalla de Telefe. Allí, quien se hizo presente fue nada más y nada menos que Romina Uhrig, la exparticipante de Gran Hermano que asistió al estudio junto a sus tres hijas.
Fue Mía, la mayor de las tres, quien se mostró tajante al escuchar las preguntas de la conductora. “¿Estás contenta de estar con tu mamá otra vez?”, quiso saber. «Muy, me hacía mucha falta. La extrañé más a los 3 meses, era mucho tiempo para mí. Nunca nos habíamos separado ni una semana”, aseveró frente a las cámaras.
“¿Cómo era verla a mami por la tele? ¿Por momentos decías ‘no hagas esto’, ‘no hagas lo otro’?”, indagó nuevamente Georgina Barbarossa sin esperar la respuesta que estaba a punto de recibir. “Raro. A veces me daba un poco de bronca, pero bueno, nadie es perfecto. Me daba bronca cuando se enojaba mucho», lanzó la hija de la ex Gran Hermano.
Al escuchar semejante respuesta, la conductora intentó suavizar los dichos de la nena. “Pero bueno, está bien. Uno se enoja en la vida. Yo me enoja, uno no es un cascabelito todo el día”, aseveró. “Para colmo yo sé cómo es ella, que no le gusta eso… Yo soy bastante hincha como mamá”, acotó inmediatamente Romina Uhrig.
Cabe recordar que días atrás, la exdiputada salió a afrontar muchas de las críticas que recibió. “Nunca dije que no tenía dónde vivir. Ellos la dibujaron cómo quisieron e interpretaron todo cómo quisieron… diciendo que yo me hacía la pobrecita, la manicura pobre o que yo fui para ganar la casa. Me hubiese encantado ganar la casa, pero yo nunca dije que fui por la casa o por el premio. Dije que iba porque tenía una cuenta pendiente conmigo, que me encantaría trabajar de lo que siempre me gustó. Yo desde chica siempre quise estudiar actuación, pero nunca lo pude hacer», reveló en «La tarde del Nueve».