No se guardó absolutamente nada y se mostró más tajante y directa que nunca. Sucede que Romina Uhrig ha sido, sin lugar a dudas, una de las participantes más cuestionadas de la edición de Gran Hermano que finalizó hace muy pocos días y que se emitió a través de la pantalla de Telefe bajo la conducción de Santiago del Moro.
Ahora, la exdiputada habló con La tarde del 9, donde enfrentó todo lo que se ha dicho de ella. «Primero que nunca dije que era pobre, y tampoco dije que era millonaria; y no soy millonaria. ¡Ojala fuera millonaria!», comenzó manifestando delante de cada uno de los televidentes, tratando de aclarar ciertas cuestiones.
Sin embargo esto no fue todo, ya que inmediatamente decidió ir por más. «Cuando entré a la casa De Gran Hermano, Walter tenía que buscarnos un alquiler para las nenas y para mí. Cuando te separás y empezás con abogados, que te dicen ‘te corresponde esto’, te das cuenta que no hacés nada con eso, y yo tuve que empezar a laburar», afirmó.
«Y en la casa lo hablaba con las chicas como cuando estás en tu casa y no te das cuenta lo que decís o no, porque te relajás. Creo no haber dicho nada mal, al contrario, no me dio vergüenza decir que tenía que empezar a hacer uñas de vuelta. Obviamente que a mí me ayudó muchísimo en ese momento porque la cosa cambia cuando estás separada, ya no es lo mismo», afirmó Romina, exparticipante de Gran Hermano.
«Yo nunca dije que no tenía dónde vivir, nunca dije que no sabía dónde iba a alquilar. Todo el tiempo en la casa de Gran Hermano iba al confesionario y le preguntaba si las nenas seguían viviendo en el mismo lugar, y no me decía nada porque no podían. Nunca dije que iba por la plata o por la casa, yo fui porque tenía una cuenta pendiente conmigo, que me encantaría trabajar de lo que me gusta cuando era muy chica», finalizó.
