El pasado domingo 14 de mayo se realizaron las elecciones provinciales en Tierra del Fuego. Allí, Gustavo Melella fue reelecto como gobernador, mientras que Republicanos Unidos, partido que responde a Javier Milei, ganó bastante terreno y se consolidó como tercera fuerza en el distrito. A pesar de ello, el resultado para el espacio fue negativo porque la Junta Electoral le impugnó los votos a dos de sus concejales.
«Las Juntas Electorales comienzan el escrutinio definitivo, en el Salón Conrado Witthaus de Ushuaia», anunció la entidad por medio de su cuenta de Twitter. Sin embargo, instantes después comunicaron que el espacio que representa al economista que irá por la presidencia cuenta con dos boletas impugnadas porque su color es diferente al que realmente debía tener.
«Resolvieron que los votos recurridos de Republicanos por motivo del color de la boleta verde sean votos nulos, por no cumplir con lo que establece la ley y las ordenanzas municipales sobre qué boletas se deben emplear. La ley establece que uno de los motivos de nulidad de los votos es usar boletas distintas a las oficializadas, lo que en este caso se verifica claramente», señalaron en referencia a que eran de color verde cuando realmente debían ser amarillas.
Los candidatos a concejales de Republicanos Unidos habían logrado un 4,12% y 4,30% de los votos que les daban este lugar. Sin embargo, La Libertad Avanza perdió a estos dos dirigentes de sus cargos por los motivos detallados anteriormente, a pesar de que sus principales funcionarios salieron al cruce contra la Junta Electoral de Tierra del Fuego.
El reclamo de Republicanos Unidos
Ante esta medida, el dirigente Santiago Pauli respondió en nombre de Javier Miei por medio de sus redes sociales. «En Tierra del Fuego nos están robando dos bancas ganadas por el voto de la gente en este momento. La justicia determinó aceptar como voto válido aquellos emitidos con la boleta en disputa y declarados válidos. Pero los recurridos no son válidos. Aquellos mal recurridos también son declarados nulos sin que podamos impedirlo. Es decir, si otro partido recurrió «mal» nuestros votos, son declarados nulos, aunque nosotros no los hayamos recurrido», denunció.
«Los antecedentes determinan que siempre se priorizó la voluntad clara del elector. Hoy no. No importa lo que votaron los fueguinos. Presentamos una medida cautelar para impedir la destrucción de las boletas y para que lo resuelva el Superior Tribunal de Justicia. La ignoraron», lamentó el dirigente que remató: «¿Quiénes se benefician con la decisión antidemocrática de la Justicia? El partido del gobernador y el partido de la vicegobernadora».
