En Juntos por el Cambio se reunieron para definir si sumar al gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, o no. Sin embargo, esta decisión tuvo un efecto adverso dentro del PRO, donde terminaron enfrentados Horacio Rodríguez Larreta (a favor de su inclusión) y Patricia Bullrich (en contra). En medio de este escándalo quedó Mauricio Macri que tuvo que tomar postura por uno de los dos lados.
Desde el lado de la exministra de Seguridad sostienen que el dirigente del Partido Justicialista podría «desperfilar» al frente opositor, por lo que no avalan su ingreso. De hecho, el titular del PRO, Angelini, es muy cercano a la precandidata a presidenta y rechazó su inclusión más allá del deseo del jefe de gobierno porteño que ve con buenos ojos su inclusión.
En el entorno de Larreta quieren que en los próximos días haya una reunión de la mesa chica del PRO porque no todos sus dirigentes rechazan la inclusión de Juan Schiaretti. El gran objetivo, según NA, es forzar a una votación interna que defina qué camino tomar. Además, desde este mismo sector están en contra de la última condición de Bullrich a Espert.
Lo que sospechan desde el lado de la exministra de Seguridad es que José Luis Espert, al tener ideas económicas similares a las de ella, podría restarle votos y terminaría favoreciendo a Horacio Rodríguez Larreta. Teniendo en cuenta esto, la interna en el macrismo continúa al rojo vivo y en los próximos días se verán obligados a reunirse para limar asperezas.
La postura de Mauricio Macri
A su vez, una de las decisiones más esperdas era la de Mauricio Macri que, al tanto de lo sucedido, decidió tomar partido por el lado de Bullrich. El expresidente se mostrará abiertamente junto a Luis Juez, senador cordobés que irrumpió en el encuentro de hoy para rechazar la inclusión de Juan Schiaretti porque él es su oposición en Córdoba.
