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ESPECTÁCULO

Viviana Canosa y el rol de Máximo Kirchner en China: «Lo mandó la mechera para que controle al ministro manos de tijera»

A raíz del viaje del Gobierno a China, Viviana Canosa apuntó contra el rol de Máximo Kirchner en las negociaciones.

Viviana Canosa

Dentro del Gobierno están en una etapa muy particular porque mientras Alberto Fernández pasa sus últimos días como presidente, los demás tratan de definir un candidato para octubre. Sin embargo, el ministro de Economía, Sergio Massa, se fue a China junto a Máximo Kirchner y una enorme comitiva a buscar acuerdo, algo que criticó la periodista Viviana Canosa.

En su editorial por LN+, la comunicadora cuestionó que en un país «con una inflación del 8,4% mensual y el dólar a 500 mangos, donde no funciona nada, este Gobierno habla de cualquier cosa. De la copa menstrual, por ejemplo, como si fuese un tema de Estado». Seguido a esto, pasó una fotografía del viaje a Asia y apuntó contra los dirigentes oficialistas.

Lo que mostró, precisamente, fue el titular de una noticia en la que señalan que el hijo de la vicepresidenta es «clave» en el viaje. «Máximo Kirchner no puede ser clave en absolutamente nada, es irrelevante. Los tipos te ponen en el canal que le entregó Massa a Fontevecchia que es un crack, solo un termo puede pensar eso. Obvio que lo mandó la mechera para que controle al ministro manos de tijera«, afirmó.

«Si queres saber de qué se trata el viaje a China, tenés que ver otro medio. Fueron a China a vender nuestra soberanía, señores. Son unos vende patria. Le ofrecimos la prueba de amor a los rusos, nos rechazaron y nos bajamos los pantalones con los chinos. Canal E es el favorito de Sergio Massa. Es el canal económico de las buenas noticias, todo es good news. Ahí Máximo es la virgen María y Massa es dios. Es mentira que los K no quieren a los medios, no quieren a los opositores«, agregó.

Libertad de expresión

Por otro lado, Viviana Canosa lamentó que en el Gobierno «solo quieran escuchar una voz» porque «vas haciendo zapping y tenés todas las voces, pero ellos solo quieren una. Todas las voces, todas K. No les gusta, no soportan la libertad de expresión. Entregan medios a amigos para que dibujen la realidad. Vivimos en una película de terror», cerró.