Laurita Fernández logró emocionar a todo el equipo de «Bienvenidos a Bordo» en el episodio final del programa de juegos. En los últimos minutos de la emisión que se puso en la pantalla de El Trece, la rubia decidió dedicarle a unas palabras a sus compañeros, quienes le mostraron buena predisposición desde el comienzo.
«Voy a tratar de ser breve, porque me va a costar no llorar, pero quiero contarles cómo fue el inicio de esto», arrancó diciendo Laurita Fernández. En ese momento, la animadora recordó que no estaba pasando por un buen momento a nivel laboral cuando la llamaron para que forme parte del proyecto: «Yo estaba en casa, estaba sin trabajo y me llama Peluca para reemplazar a Guido, porque el programa terminaba y necesitaban unos días más, y Guido ya se había ido de vacaciones».
«Necesitaban 5 o 10 programas. Yo dije que sí, por supuesto, y vine. Esos 5 o 10 programas se transformaron en 400 programas que estamos cumpliendo hoy gracias a ustedes, que bancaron el programa, que lo apoyaron, que se divirtieron con nosotros», añadió Laurita Fernández remarcando el gran apoyo de la audiencia.
Por otro lado, la actriz y animadora habló de la buena química que hubo frente a las cámaras y detrás: «Cuando hay buena onda, cuando hay buena energía, cuando nos divertimos, eso no se puede forzar ni se ensaya, eso está o no está… y acá estuvo por montones. De corazón, nos divertimos mucho haciéndolo. Agradecemos que ustedes también se hayan divertido»».
Agradecimiento especial
Por último, Laurita quiso remarcar el compañerismo de Hernán Drago, con quien le tocó trabajar en frente de la pantalla desde su desembarco en el ciclo de juegos de Canal Trece. «No quiero dejar de destacar, personalmente, a la primera persona que yo vi cuando llegué ese primer día al piso, que era una bola de nervios, y me encontré con él».
«Sucedió una química instantánea donde nos empezamos a divertir, a jugar, a disfrutar. Te quiero de corazón agradecer porque fuiste el mejor compañero que pude haber tenido para hacer este programa», añadió la famosa conmoviendo a su colega hasta las lágrimas y generando un clima emotivo en todo el estudio.